La invasión de Rusia en Ucrania continúa. Y más de 75 días después, el desgaste de las tropas de Vladímir Putin empieza a ser más que notable. Según el Pentágono, el avance ruso sobre el Donbás, al este de Ucrania, se estaría viendo ralentizado por el agotamiento de sus propios soldados, quienes habrían decidido dejar de exponerse tanto al fuego enemigo para intentar salvaguardar sus vidas.
Además, un importante obstáculo añadido. Hay barro en los campos, que impiden el avance, y la logística del Ejército ruso sigue siendo insuficiente. Según recoge El Mundo, algunos departamentos se habrían negado a obedecer las órdenes, mientras que algunos oficiales tardan en cumplirlas, lo cual estaría desembocando en motines. Una información, ofrecida por Estados Unidos, que dejaría entrever las debilidades de las tropas rusas.
Y es que nada queda de aquella ofensiva relámpago sobre Ucrania. El conflicto se alarga ya más de dos meses y medio, algo con lo que, probablemente nadie contara. Las tropas rusas están poco acostumbradas a operaciones grandes y prolongadas. Prueba de ellos son las guerras de Georgia y Siria que involucraron sólo a una pequeña parte de la armada. A esto hay que sumar la corrupción en las filas, la falta de suboficiales y oficiales experimentados, unas jerarquías centralizadas y una logística especialmente desastrosa.
Por otra parte, cabe destacar el papel de la aviación, no por sus logros, sino más bien al contrario, por su falta de actuación, a pesar de su superioridad respecto al enemigo. Los generales se han apoyado, siempre en la primera fase, en técnicas obsoletas, de forma que han dejado expuestas a las columnas de soldados a las trampas de enemigos bien adiestrados.
Ucrania resiste ante un enemigo que se presentaba muy superior
Con todo ello, Ucrania resiste. A pesar de los constantes bombardeos de Rusia que arrasan a ciudades y acaban con la vida de cientos de civiles, la organización de los de Volodímir Zelenski está haciendo que resistan ante un enemigo que se presentaba como muy superior en todas sus fases, pero que en la práctica no consigue demostrarlo.