El Ejército de Israel ha comenzado a convocar a 7.000 reservistas para que se incorporen al servicio activo al tiempo que el Gobierno israelí estudia ya planes para una ofensiva terrestre.
Según informa Jerusalem Post, el Ejecutivo presidido por Netanyahu ha convocado a los militares que han servido en artillería, baterías Iron Dome, médicos, paramédicos, IAF, inteligencia y otras unidades de combate.
Las instrucciones también afectan a las tropas en servicio activo ya que, según esta misma fuente, las tropas de combate tampoco podrán abandonar sus bases y se han redistribuido tropas terrestres adicionales a la frontera antes la imninente campana por tierra.
La orden incluye la Brigada de Paracaidistas, la Brigada de Infantería Golani y la Séptima Brigada Blindada.
A lo largo de este jueves se espera que los planes elaborados por la División de Gaza y el Comando Sur sean aprobados en las próximas horas.