Dos proyectiles han impactado esta la noche en la fortificada Zona Verde de Bagdad, la capital iraquí, cerca de la Embajada de Estados Unidos, según ha informado el portal local de noticias BasNews. Esta es la zona teóricamente más segura de la ciudad, donde están los edificios oficiales.
La cadena de televisión Al Mayadín ha indicado que las sirenas de la Embajada norteamericana han comenzado a sonar poco después del impacto, así como las de la Zona Verde, sede de las principales instituciones gubernamentales y embajadas.
Fuentes de seguridad iraquíes han señalado que uno de los cohetes ha caído entre un edificio en construcción y un lago cercano a la Embajada.
Este ataque llega un día después del perpetrado por la Guardia Revolucionaria iraní contra bases norteamericanas en Irak, en respuesta a la muerte del general iraní Qasem Soleimani.
Un responsable de la Guardia Revolucionaria ha asegurado que los ataques han matado a al menos a 80 militares estadounidenses, si bien Washington no ha facilitado por ahora un balance de bajas. Por su parte, las fuerzas de seguridad iraquíes han señalado que los ataques no han causado bajas en las Fuerzas Armadas del país.
Soleimani murió junto al 'número dos' de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), Abú Mahdi al Muhandis, y varios milicianos iraquíes y militares iraníes en un bombardeo de Estados Unidos en el aeropuerto de la capital de Irak, Bagdad. El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, prometió una "dura venganza" en respuesta.
Washington argumentó que llevó a cabo el ataque "para proteger al personal estadounidense en el extranjero", a raíz de las protestas contra su Embajada en Bagdad en protesta por otro bombardeo en el que murieron 25 miembros de las FMP.
Los bombardeos contra las FMP fueron ejecutados en respuesta a la muerte de un contratista estadounidense en un ataque con proyectiles contra una base militar situada cerca de Kirkuk.
El Gobierno iraquí ha condenado estos ataques por parte de Estados Unidos y ha recordado que las FMP son un elemento fundamental en la lucha contra Estado Islámico. En este sentido, ha denunciado que los bombardeos fueron llevados a cabo de forma unilateral y violando los acuerdos alcanzados con la coalición internacional que lidera Washington en la lucha contra los yihadistas.
Por ello, el Parlamento iraquí aprobó el domingo una moción que exige la expulsión de las tropas estadounidenses del país y obliga al Gobierno a comprometerse a hacer público cualquier acuerdo que alcance en el futuro para la presencia de asesores y formadores militares extranjeros.
Durante la jornada del lunes, el Ejecutivo iraquí limitó las actividades de la coalición internacional y las redujo a los trabajos de entrenamiento y asesoría, prohibiendo sus movimientos por tierra y aire.