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Ucrania ha denunciado el uso por parte de Rusia de bombas de fósforo en la región de Lugansk, unas armas prohibidas desde la Convención de Ginebra. Las bombas de fósforo blanco causan la muerte de las personas o quemadura muy graves, incluso de órganos internos. ¿Qué son estas bombas de fósforo y por qué son tan dañinas?
Las bombas de fósforo están hechas con una sustancia química tóxica, el fósforo blanco, que arde de manera espontánea en contacto con el oxígeno. Es un sólido ceroso blanco o amarillo de olor con un olor similar al ajo. No lo produce la naturaleza, es manufacturado de rocas de fósforo.
El fósforo blanco es usado por la industria para producir productos químicos para hacer abonos, aditivos para alimentos, y productos de limpieza. En muy pequeñas cantidades se usaba antes también en pesticidas y en fuegos artificiales.
El problema es que el fósforo blanco también se usa para hacer armas. Arde fácilmente al contacto con el oxígeno y forma una densa cortina de humo blanco que impide ver el movimiento de las tropas. Teniendo en cuenta que al Ejército de Rusia le está resultado muy difícil avanzar, el uso de estas bombas podría darle ventaja frente a la resistencia ucraniana.
La reacción química de esta bomba crea un intenso calor de unos 815ºC y produce tanto luz como un espeso humo químico. La exposición al fósforo blanco puede causar irritación y quemaduras, incluso en órganos internos, como el hígado, los riñones, el corazón, los pulmones y los huesos. Muchas veces resulta mortal. Es más, las quemaduras de solo el 10% del cuerpo con esta sustancia resulta mortal.
La cura de las heridas causadas por el fósforo blanco es muy complicada. En cualquier momento se pueden infectar o reavivar, solo que levantar los vendaje para curarlas. La muerte causada por estas bombas de fósforo blanco puede ser lenta y dolorosa. Está prohibido su uso contra la población civil desde la Convención de Ginebra.
Fuerzas militares de Ucrania han denunciado que Rusia ha usado bombas de fósforo en Lugansk y ha matado al menos a cuatro personas, dos de ellas niños. Ayer fue el alcalde de Irpin quien hizo la misma denuncia.
Ante estos hechos, el Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania ha lanzado unas recomendaciones para que la población se proteja de un posible ataque con fósforo blanco. Hay que "cerrar firmemente ventanas, puertas, chimeneas y puntos de ventilación", "sellar las grietas en ventanas con papel o celofán", "encender la televisión o la radio para recibir instrucciones" y estar atentos a una “posible evacuación".
De producirse una evacuación es necesario "portar un equipo de primeros auxilios", "vestir de forma que quede la mínima cantidad de piel expuesta al aire", "usar máscaras antigás o vendas empapadas de agua" y "no tocar nada fuera de la casa".