Jeff Bezos, el millonario fundador de Amazon, ha manifestado este pasado martes que apoya el ambicioso plan de infraestructuras del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, lo que conlleva un aumento de los impuestos corporativos.
Biden presentó esta ambiciosa propuesta de 2.000 millones de dólares, conocida como American Jobs Plan el mes pasado. El plan pretende crear varios millones de puestos de trabajo, reconstruir más de 32.000 kilómetros de carreteras, ampliaría el acceso al agua potable de la población, la extensión de la red de banda ancha e invertir en servicios sociales como en el cuidado de las personas mayores.
Este ambicioso plan, cuya cifra se gastaría a lo largo de ocho años, se pagaría durante más de 15 años aumentando la tasa del impuesto corporativo (a las empresas), que pasaría del 21% al 28%, poniendo fin a los recortes de impuestos de la era de Donald Trump .
"Apoyamos el enfoque de la Administración Biden de realizar inversiones audaces en infraestructura estadounidense. Tanto demócratas como republicanos han apoyado la mejora de las infraestructuras en el pasado y es el momento adecuado para trabajar juntos para que esto suceda", afirma Bezos en un comunicado público. "Reconocemos que estas inversiones requerirán concesiones por todos los lados, tanto en sus aspectos específicos como en la forma en la que se pagarán (apoyamos un aumento en la tasa de impuestos corporativos)", continúa Bezos.
El Presidente, Joe Biden, ya ha instado al Congreso a aprobar su plan, argumentando que de no realizar estas inversiones se debilitaría a la clase media del país y dejaría a los Estados Unidos en una desventaja competitiva en el extranjero. Aunque parece que muchos legisladores no están por la labor, y es que varios senadores demócratas han mostrado sus dudas sobre subir el impuesto a las empresas.
El apoyo explicito de Bezos, el segundo empleador más grande del país, podría hacer desaparecer las reticencias de un buen número de legisladores y hacer que el plan salga adelante.