El Gobierno de Groenlandia ha manifestado este viernes que el territorio "no está en venta" después de que el diario estadounidense 'Wall Street Journal' revelara el interés del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la posibilidad de adquirirlo.
Según recoge el medio de comunicación norteamericano, la idea que lleva impulsando Trump desde hace un tiempo divide a sus consultores, algunos lo consideran como una "sólida estrategia económica" y otros creen que se trata de una "fantasía pasajera".
Groenlandia, con una población de 56.000 habitantes, está constituida como una región autónoma de Dinamarca. Pese a que su gobierno decide en la mayoría de los asuntos internos es el gobierno danés el que se encarga de la política exterior y de seguridad.
En la isla se encuentra la base militar norteamericana de Thule, un destacamento sumamente importante por su situación geográfica, representa la base más septentrional dentro del sistema global de radar estadounidense. Además, cuenta con importantes recursos naturales como el petróleo.
El Pentágono impidió el año pasado que Pekín financiara la construcción de tres aeropuertos allí, a fin de evitar influencias chinas en la zona.
El país nórdico recibirá la visita de Trump en septiembre aunque por otros motivos. Mientras, las autoridades groenlandesas han respondido "no, gracias, a la idea de Trump" a lo que añade la diputada groenlandesa Chemnitz Larsen: "Creo que el único camino para una Groenlandia más independiente pasa por una sociedad en igualdad de condiciones con Dinamarca".
desde el continente, los políticos daneses también han respondido a la noticia con sorpresa. El ex primer ministro Lars Lokke Rasmussen incluso lo ha tildado de "inocentada" hace pocas horas en su Twitter.