Wang 'William' Liqiang, un exespía chino, ha pedido asilo en Australia tras ofrecer a los servicios de Inteligencia nacionales información sobre las operaciones de interferencia política en otros países llevada a cabo por China. Uno de esos países es precisamente Australia.
Según detalló Wang a la agencia australiana de contraespionaje ASIO, los altos oficiales de Inteligencia militar de China financian y realizan operaciones de interferencia política en Hong Kong, Taiwán y Australia, según el medio australiano Nine. "He estado involucrado y he participado en una serie de actividades de espionaje", informó en octubre Wang a ASIO en un comunicado.
El medio ha informado de que Wang estaba involucrado en operaciones en cubierto que buscaban socavar el movimiento democrático de Hong Kong e interferir en el sistema político en Taiwán y Australia. Además, afirmó ser parte de operaciones clandestinas para infiltrarse en universidades y medios de comunicación de Hong Kong.
Actualmente, Wang vive con su esposa e hijos en Sídney, con una visa de turista. Tiene miedo de regresar a su país por la información que ha brindado y por ello ha solicitado asilo político. "Estaré muerto", ha dicho en una entrevista a 'Nine'.
El tesorero de Australia, Josh Frydenberg, aseguró el sábado que el "asunto es delicado" y que las autoridades estaban investigando. "Estas son informaciones muy inquietantes, de modo que el asunto ahora está en manos de las agencias policiales apropiadas", indicó Frydenberg, según la cadena nacional ABC.