Donald Trump volvió a prometer este lunes durante su discurso de investidura renombrar el 'golfo de México' como 'golfo de América'. "Dentro de poco, vamos a cambiar el nombre de golfo de México a 'golfo de América'".

Su proclama provocó el aplauso de la audiencia, pero también las risas de algunos presentes, como es el caso de Hillary Clinton, que no puedo contener su incredulidad al oír las palabras del ya 47º presidente de Estados Unidos. 

La exprimera dama baja la cabeza para intentar esconder la gracia que le producen las palabras de Donald Trump. Se trata de uno de los momentos más viruales del discurso, que se celebró en el interior del Capitolio por el frío extremo que azota a Washington. 

La propuesta de renombrar el golfo es solo una de las muchas promesas que había hecho Trump. Sin embargo, no será nada fácil hacerla real. La ONU tiene en cuenta el mapa náutico de 1772 que demuestra que el nombre tiene años de antigüedad, lo que sirve para justificar su mantenimiento. Fernando López, director del Instituto Geográfico de Aragón explica que el nombre de los accidentes geográficos "vienen determinados por el uso y la utilización en la costumbre histórica".

El nuevo nombre, 'Golfo de América', con el que Trump quiere volver a bautizarle solo tendría validez en Estados Unidos. En el caso de Cuba, seguirá perteneciendo al Golfo de México. Sin embargo, este anuncio del ya presidente estadounidense, ha tenido respuesta por parte de los mexicanos, que han contestado ironizando sobre lo planteado: ¿Por qué no lo llamamos la América mexicana?, comentaba Claudia Sheinbaum, presidenta de México.

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