El Gobierno de Nepal ha comunicado que el número de víctimas mortales por las inundaciones y deslizamientos de tierra ha aumentado a 209, con 29 personas desaparecidas y 142 heridas. Las fuertes lluvias que han azotado el país durante días han sido la causa de esta tragedia.
Las fuerzas de seguridad están colaborando en las operaciones de rescate y han logrado salvar a más de 4.200 personas de las áreas afectadas. Sin embargo, su trabajo se ve dificultado por las infraestructuras dañadas y las carreteras bloqueadas.
La Policía de Nepal ha instado a la población a mantenerse en alerta, especialmente a quienes residen en zonas de alto riesgo, según informa el diario local The Kathmandu Post.
Las lluvias comenzaron el jueves por la noche y han afectado severamente a gran parte del país, especialmente a las regiones central y oriental. La geografía montañosa de Nepal y su red de ríos lo convierten en un lugar particularmente susceptible a desastres naturales.
El Gobierno de Nepal ha declarado tres días de luto tras informar que las inundaciones han dejado más de 200 muertes.
El gabinete se reunió la noche del lunes tras el regreso del primer ministro nepalí, Sharma Oli, de la Asamblea General de la ONU en Estados Unidos, según reporta el diario local.
Durante el luto, la bandera nacional ondeará a media asta y se otorgarán 200.000 rupias (1.500 euros aproximadamente) a las familias de las víctimas. Si no se localizan a los desaparecidos en diez días, se les considerará fallecidos y recibirán la misma compensación.
Además, el Gobierno ha decidido que todos los heridos recibirán tratamiento gratuito. Actualmente, 92 personas están siendo atendidas en hospitales, según el ministro de Comunicación, Prothvi Subba Gurung.
Nepal se encuentra entre los países más vulnerables a desastres naturales debido a su geografía montañosa, que lo expone a deslizamientos de tierra, avalanchas y terremotos. La presencia de numerosos ríos, que tienden a desbordarse durante la temporada de monzones, agrava la situación, ya que las lluvias torrenciales pueden provocar inundaciones devastadoras.
De hecho, en las inundaciones de 2004 dejaron al menos 1.5000 muertos. En 2014, 200 personas perdieron la vida, en 2017 resultaron 140 muertes, en 2021 al menos 20 personas y en 2022, se reportaron al menos 40 muertes.
A su vez, el cambio climático también ha intensificado la frecuencia y severidad de eventos climáticos extremos, lo que aumenta el riesgo de sequías, lluvias intensas y deslizamientos de tierra. Además, la rápida urbanización y la falta de planificación en áreas propensas a desastres contribuyen a la exposición de la población a estos peligros.
La pobreza y la falta de recursos limitan la capacidad de los habitantes de Nepal para prepararse y recuperarse de desastres. La infraestructura del país a menudo es insuficiente para soportar eventos naturales, lo que agrava aún más la crisis.
Finalmente, la rica biodiversidad y los ecosistemas frágiles de Nepal también se ven afectados por desastres naturales, repercutiendo en las comunidades que dependen de estos recursos para su subsistencia. Estos factores combinados sitúan a Nepal en una posición crítica frente a la amenaza constante de desastres naturales.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.