El trauma infantil y la obsesión por la muerte de Florian Willet, el hombre detenido tras presenciar el primer uso de la 'cápsula para el suicidio'

Florian Willet, copresidente de The Last Resort, la empresa creada para promocionar y operar la 'cápsula para el suicidio', continúa detenido por las autoridades de Suiza tras ser arrestado por su relación con la primera utilización del dispositivo inventado por Philip Nitschke el pasado lunes, que conllevó la muerte de una mujer estadounidense de 64 años con problemas graves de salud.

Willet, activista proeutanasia, habría sido la única persona que presenció el fallecimiento de la mujer en la frontera entre Suiza y Alemania después de que esta presionara a voluntad propia el botón del dispositivo Sarco para liberar gas nitrógeno en la cámara. Una actividad que está prohibida por Suiza, que permite el suicidio asistido (si la persona comete el acto letal ella misma), pero no la eutanasia.

El caso de Florian Willet: su experiencia personal marcó su trayectoria profesional

La policía arrestó a Willet y a otras personas tras el deceso de la mujer. Todos ellos se encuentran bajo custodia de las autoridades, recoge 'Daily Mail'. La fiscalía de la región suiza de Schaffhausenthe, donde tuvo lugar la muerte de la estadounidense, confirmó este pasado martes que ha abierto "procedimientos penales contra varias personas por inducción y asistencia al suicidio". Un dato reseñable es que Willet es una de las personas que más se ha volcado con el proyecto de Sarco. Y es que, según explicó en una entrevista, la inspiración por esta lucha surgió a raíz de que pensara en quitarse la vida a una edad temprana, así como también por el suicidio de su padre cuando era adolescente.

Willet, nacido en Alemania, se describe a sí mismo como un economista y psicólogo de la comunicación. Trabajó anteriormente como portavoz de medios para la clínica de eutanasia Dignitas antes de unirse a The Last Resort. Su experiencia personal marcó su trayectoria profesional: "A los cinco años comencé a considerar mi propia muerte. Y mi padre se suicidó cuando yo tenía 14 años. Nunca tuve problema con ello. Me sentí muy triste, porque amaba a mi padre, pero entendí inmediatamente que mi padre quería hacer eso porque era una persona racional. Esperar que él siguiera vivo solo porque yo necesitaba un padre significaría prolongar su sufrimiento. Esta expectativa por mi parte sería muy egoísta. Por eso, acepté la situación y la afronté como adolescente", explicó Willet en una entrevista difundida en YouTube.

Su pensamiento en torno al derecho a morir

El copresidente de The Last Resort afirmó en la misma entrevista que, tras la muerte de su padre, lo visitaron un sacerdote y un psiquiátra y le dijeron que su progenitor había sido "egoísta" porque debería haber seguido vivo por su hijo, con lo que no estaba de acuerdo: "Mantener con vida a mi padre solo porque lo necesitaba siendo joven era como estar en una granja utilizando caballos o animales para haer el trabajo. Abusar de un ser vivo. Es horrible", apuntó Willet, que aseguró haberse criado "completamente ateo" y criticó la "extraña moralidad" que, según él, fue creada por el cristianismo y otras religiones.

Miembro de la sociedad de alto coeficiente intelectual Mensa, Willet sostiene que su "lógica", así como la importancia que concede a la "empatía", han impulsado su pensamiento en torno al derecho a morir. En julio, al presentar a Sarco al mundo en una conferencia de prensa, aseguró ante los periodistas presentes: "He comparado todo tipo de opciones disponibles para morir, autodeterminado, y no hay mejor manera, a mi juicio, para mí, que simplemente respirar aire sin oxígeno, hasta que pierdas el conocimiento y caigas en un sueño interminable".

Las autoridades de Suiza prohibieron el uso de Sarco

Sarco, la máquina, fue diseñada para permitir que la persona que se encuentra en su interior presione, como decíamos, un botón que inyecta gas nitrógeno en la cámara sellada. La persona se queda dormida y muere por asfixia en unos minutos. El inventor del dispositivo, el doctor Philip Nitschke, afirmó que la muerte de la mujer el lunes se desarrolló "como se esperaba". Según explicó ante medios de Países Bajos: "Supongo que perdió el conocimiento a los dos minutos y que falleció después de cinco".

El pasado mes de julio, Willet destacó que Suiza era "de lejos el mejor lugar" para utilizar Sarco debido a su "maravilloso sistema liberal". Pero el ministro del Interior, Baume-Schneider, aseguró también el pasado lunes que la cápsula "no cumple con la ley en dos aspectos": "En primer lugar, no cumple los requisitos de la ley de seguridad de los productos y, por lo tanto, no puede comercializarse. En segundo lugar, el uso correspondiente del nitrógeno no es compatible con el artículo de finalidad de la Ley de sustancias químicas. Fiona Stewart, que forma parte del consejo asesor de The Last Resort junto a Willet, ha afirmado que el grupo estaba actuando junto a un equipo de asesoramiento legal que "desde 2021 ha determinado sistemáticamente que el uso de Sarco en Suiza sería legal".

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento