La ciudad de Nueva York ha estado en vilo por un rescate de infarto durante las últimas 48 horas. Charlotte Sena, una niña de nueve años que fue raptada el sábado cuando iba en bicicleta por el parque Moreau Lake, fue rescatada por la Policía de Nueva York tras una intensa búsqueda que duró dos días.
La clave para encontrar a Charlotte fue una nota de rescate que el secuestrador, identificado como Craig Nelson Ross Jr., de 47 años, dejó en el correo de la familia de la niña. La Policía pudo cotejar las huellas dactilares de la nota con las de Ross, quien tenía antecedentes por conducir ebrio en 1999.
Según el periódico The New York Times, el lunes por la tarde, un coche se acercó a la casa de la familia y alguien, presumiblemente Ross, depositó una nota de rescate en el correo. La Policía recuperó la nota y confirmó la identidad del secuestrador.
Poco después, la Policía se presentó en la vivienda de Ross en Milton. Ross fue arrestado al instante. Dentro de una caravana donde vivía, hallaron a Charlotte oculta en un armario. La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, dijo que “tras cierta resistencia, el sospechoso ha sido detenido e inmediatamente se ha localizado a la niña dentro de un armario”. Hochul añadió que Charlotte fue trasladada al hospital y que estaba “aparentemente ilesa y ya reunida con sus padres”.
El sábado por la tarde, Charlotte salió a pasear en bicicleta mientras acampaba con sus padres. Al ver que no volvía, sus padres la buscaron y encontraron la bicicleta abandonada, lo que les hizo pensar que había sido secuestrada, un hecho que Hochul calificó como “la peor pesadilla de todo padre”.
Unas 400 personas, entre ellas policías, guardabosques y bomberos, buscaron a Charlotte en un área de 74 kilómetros. Además del personal de tierra, se usaron drones y aerolanchas en el operativo de rescate.