Rodolfo Sancho, ya desde Tailandia, donde hoy visitará a su hijo Daniel Sancho en la cárcel, ha señalado que lamenta el revuelo causado. Y ha añadido que “quiero dejar claro que mi hijo ama este país, a su gente y su cultura”. Rodolfo Sancho admite el momento tan complicado que vive la familia y ha agradecido “los miles de mensajes de gente cercana y amigos apoyándome”.
"Creen que estoy tirado por los suelos, ese no soy yo. Hay dos formas de tomarse las cosas en la vida, o como una desgracia o como un reto. No van a conseguir lágrimas", aseguró el actor de 48 años, que rechazó contestar a las preguntas que calificó como personales.
El actor ha mostrado su confianza en la Policía y la Justicia de Tailandia, un país, ha señalado en declaraciones recogidas por El Comercio, que su hijo “ama”, como “a su gente y su cultura”.
El padre de Daniel Sancho ha confesado que "siento el revuelo que se ha creado" por el asesinato y descuartizamiento del colombiano Edwin Arrieta a manos de su hijo y ha aclarado que "no viene incitado ni por mí ni por mi familia".
También ha tenido palabras para la familia del colombiano, a quienes les ha mandado su "más sentido pésame y condolencias" porque "entiendo que estará con un enorme dolor" tras lo sucedido.
Esperanzado, Rodolfo ha expresado el deseo de que la Policía entregue el informe del caso a la Fiscalía y abogados "para saber exactamente qué es lo que ha pasado" y agradecía a toda la gente que le ha apoyado en estas semanas tan difíciles para él y su familia.
Estas son las primeras declaraciones del actor ante las cámaras, ya que cuando se dejó ver en el aeropuerto de Fuerteventura y posteriormente en Madrid no hizo ningún comentario y advirtió que cuando llegara el momento oportuno hablaría sobre este caso que ha dado la vuelta al mundo.
Daniel Sancho está detenido desde el pasado cinco de agosto acusado de matar y descuartizar a Edwin Arrieta en la isla de Ko Pha Ngan. Un crimen que el joven de 29 años ha confesado.
Sin embargo, los investigadores han determinado que la víctima no perdió la vida de manera accidental sino que fue un acto premeditado y el sospechoso actuó solo.
Daniel Sancho aseguró que Edwin Arrieta se golpeó en el baño. Sin embargo, los agentes afirman que le apuñaló en el pecho. Sancho dio negativo a la prueba de drogas y alcohol. Le han hecho un examen psicológico que no aclara si sabía lo que hacía o si estaba bajo presión por posibles amenazas.