Fernando Villavicencio, el periodista ecuatoriano "azote" del expresidente Correa

Ecuador no era un país violento. No lo era hasta que las maras, las bandas y el narco comenzaron a tomar las cárceles. Una violencia nunca vista en el país centroamericano que "adoptaba" crímenes y violencia de lo peor de los países del narco: México, Colombia, Venezuela y Bolivia. Ecuador en la última década se ha convertido en uno de los principales puntos de embarque para el tráfico global de cocaína, asegura el portal especializado InsightCrime  en su informe anual de 2023.

El asesinato el miércoles del candidato presidencial Fernando Villavicencio tras un acto de campaña en el centro de Quito volvió a poner de relieve la situación de inseguridad y violencia en la que se encuentra inmerso el país, que el próximo 20 de agosto celebra elecciones anticipadas.

El asesinado a balazos Fernando Villavicencio no era un candidato cualquiera. Las cada vez más fuertes bandas criminales, entre ellas los Lobos, los Choneros o los Tiguerones, tienen fuertes vínculos con los carteles del narcotráfico y las mafias internacionales y se disputan el control territorial tanto dentro como fuera de las cárceles ecuatorianas. Villavicencio había declarado la guerra a la corrupción y al narco y había prometido - de ser elegido Presidente- una cárcel especial de alta seguridad en la selva para aquellos que cometieran delitos de sangre vinculados con el narco.

Villavicencio, de 59 años no contaba con una larga trayectoria en cargos electos, pero sí con un amplio recorrido en el ámbito público por su labor periodística y su compromiso con el combate a la corrupción.

Ocupó un escaño en la Asamblea Legislativa, desde 2021 hasta su disolución este año. Su eslogan electoral era Es tiempo de valientes y estaba al frente del Movimiento Construye, el segundo en los sondeos como candidato a suceder a Lasso en la presidencia. Su labor como periodista de investigación, sobre todo de tramas de corrupción, le llevó a ver de primera mano como el narco se introducía en Ecuador, a través de las "bandas", la compra de políticos, los barrios marginales y, finalmente en las cárceles.

Las cárceles de Ecuador viven una guerra sin cuartel, en la que en los últimos 12 meses se han cometido más de 250 asesinatos entre diferentes bandas que luchan por el control de la cocaína (dentro de las cárceles y fuera). Villavicencio aseguraba que Ecuador se había convertido en un "narcoestado", proponía restablecer la seguridad con las fuerzas armadas y la policía en las calles, y paralelamente emprender una lucha contra lo que denominaba la "mafia política".

Rafael Correa, expresidente de Ecuador ha señalado en las últimas horas en sus redes sociales que lamenta la muerte de Villavicencio y "todas las víctimas de la violencia". Los expertos han visto la condena como "sorprendente" porque Villavicencio era conocido por su "anticorreísmo". Según la biografía que aparece en la web del partido, Villavicencio nació el 11 de octubre de 1963. Creció en un entorno rural donde aprendió a "labrar y respetar la tierra y hermanarse con los más humildes". Desde adolescente se vinculó a organizaciones sociales indígenas y de trabajadores. En 1999 fue líder sindical de la Federación de Trabajadores Petroleros (Fetrapec). Estudio periodismo y comunicación social en la Universidad Cooperativa de Colombia. Como periodista de investigación, colaboró con varios medios de comunicación ecuatorianos e internacionales, y también escribió 10 libros. Entre los medios de comunicación internacionales con los que colaboró está el británico The Guardian.

El escándalo político más grande que se destapó bajo su liderazgo como asambleísta fue el llamado caso Petrochina, la deuda que presuntamente adquirió Ecuador con China durante el gobierno de Rafael Correa y que Villavicencio denunció como un esquema de corrupción. Ese caso condenó al izquierdista Correa a 8 años de prisión. Correa huyó de Ecuador y se refugió en Bélgica, país con el que no hay acuerdo de extradición y desde donde el populista izquierdista organiza a sus huestes en Ecuador. Villavicencio tuvo que auto-exiliarse a Perú por las amenazas de muerte que sufría.

Hace unos dias el candidato asesinado denunciaba en una radio que tenía audios comprometedores contra las mafias, el narco y el expresidente ecuatoriano Correa.