La odisea de Lonnie Pesterfield: una extracción de muelas desemboca meses después en un trasplante de pulmón

Lonnie Pesterfield es un joven de Denver, en Colorado (EEUU), que hace unos meses soñaba con convertirse en bombero. Feliz y muy activo, le encantaba levantar pesas. En octubre de 2022, su madre, Stephanie, le llevó por primera vez al dentista. Fue entonces cuando la vida del menor, que entonces tenía 16 años, cambió para siempre. Por otra parte, una mujer entró en coma tras un dolor de muelas y acabaron extirpándole parte del cráneo.

La familia Pesterfield nunca imaginó que una extracción de las muelas del juicio fuese a desencadenar en una auténtica odisea médica que casi le cuesta la vida a Lonnie, según publica en exclusiva 'People'. En declaraciones a la revista estadounidense, Stephanie, madre de seis hijos, asegura que "antes solía bromear con que él es el más saludable" de todos.

Los médicos le diagnosticaron una vasculitis

Stephanie ha creado una página en la plataforma GoFundMe para recaudar fondos. En la misma, explica y detalla la historia de Lonnie, el segundo de sus hijos. El chico se sometió a una intervención bucal y a las pocas semanas tuvo que acudir a urgencias porque tosía sangre.

A las 48 horas, estaba ingresado con un respirador artificial en la unidad de cuidados intensivos (UCI) puesto que pulmones se habían encharcado de sangre. Los doctores apuntaron que era una neumonía grave y consideraron que mejoraría con el tiempo. Pero, lamentablemente, no fue así.

Una semana después, los médicos, recoge 'People', diagnosticaron al joven una enfermedad rara autoinmune: vasculitis GPA. Se trata de un trastorno poco común que causa inflamación de los vasos sanguíneos en la nariz, los senos paranasales, la garganta, los pulmones y los riñones, según la Clínica Mayo.

Lonnie fue dado de alta hospitalaria y la familia consultó a varios profesionales para atender el daño a sus riñones, hígado, bazo y páncreas. Y es que los pulmones no eran los únicos afectados por la vasculitis. No obstante, del resto sí experimentó una mejoría.

Lonnie se recupera del trasplante de pulmón

El pasado mes de enero, el adolescente se sometió a una biopsia de riñón. Y, tan sólo una semana después, comenzó a tener problemas para respirar. Otra biopsia, en febrero, confirmó que sus pulmones no mejoraban, sino todo lo contrario. Además, después de la prueba, Lonnie volvió una vez más a la UCI.

La familia Pesterfield fue consciente de la gravedad cuando supieron de la inflamación y el tejido cicatricial formado tras la cirugía. Un medicamento de inmunoterapia más fuerte tampoco resultó y los pulmones del adolescente funcionaban al 13%. Ello desembocó en la necesidad de un trasplante ya que pasaba varias horas del día conectado a una máquina de ventilación.

Dentro de todos los problemas que se le han presentado, que no son pocos, el destino quiso hacerle un guiño y Lonnie no estuvo durante muchos días en la lista de espera. Ahora, a sus 17 años, se recupera en el Hospital Universitario de Colorado tras recibir el órgano de un donante.

Su madre, como indicábamos, ha puesto en marcha una campaña para lograr dinero a través de Internet porque, además, cuatro de sus hijos tienen autismo. No obstante, Stephanie detalla que los gastos médicos de Lonnie han sido cubiertos a través del seguro y que únicamente utilizará la cantidad económica para "equilibrar las necesidades de nuestra familia".