Una mujer se ha encontrado una terrible sorpresa al regresar a su casa en Francia después de unos meses de vacaciones. La mujer había dejado el apartamento en manos de un hombre que iba a realizar unos arreglos en la casa y de su mujer.
La propietaria se fue a Argelia de vacaciones y al volver notó algo raro en su casa de Livry-Gargan, en Seine-Saint-Denis, Francia. En la cocina había un pequeño muro levantado de 1,50 metros de largo, 1 metro de alto y unos 40 centímetros de ancho.
Pero el problema no fue solo el muro, sino el olor que desprendía la cocina. La mujer decidió alertar a las autoridades tras el fuerte olor a lejía y la cantidad de moscas que había presentes en la escena, según recoge el medio local France3.
Al llegar las autoridades, los investigadores perforaron el muro y descubrieron insectos necrófagos, gusanos y una manta que cubría un cadáver. La policía judicial de Seine-Saint-Denis se ha hecho cargo de la investigación.