Estados Unidos se encuentra aterrorizado tras un incidente ocurrido en Ohio, donde un hombre de 32 años, identificado como Chad Doerman, puso en fila a sus tres hijos menores de 3, 4 y 7 años y los fusiló con un rifle. La madre de los niños también fue herida y la hija de ambos, salió corriendo durante el fusilamiento a pedir ayuda. El hombre fue arrestado en la puerta de su casa, donde se encontraba sentado en las escaleras principales, y admitió ante la justicia haber planeado los asesinatos, por lo que fue rápidamente acusado de homicidio agravado.
No es el primer caso de padres que asesinan a sus hijos en los últimos meses, pues en Inglaterra, una mujer mató a sus dos hijos y luego apuñaló a su marido mientras este se encontraba en su trabajo hace escasos días.
El asesino y padre de los tres niños fusilados, Chad Doerman de 32 años, admitió haber planeado la ejecución de los menores y de herir a la madre en la propia casa de la familia. Durante el juicio, Chad fue acusado de homicidio agravado y en las imágenes se puede ver como, paralizado, llora al conocer la sentencia. La crueldad de lo ocurrido mantiene a Estados Unidos aterrorizado, puesto que los niños en más de una ocasión quisieron huir de los ataques del padre, sin éxito.
El fiscal jefe del Tribunal Municipal del condado de Clermont, David Gast, dijo durante la lectura de cargos de Doerman el viernes que uno de los niños trató de huir a un campo cercano, pero Doerman “cazó” a su hijo y lo llevó de regreso a su casa para matarlo. Por otro lado, la hija de la pareja echó a correr por la calle gritando que su padre "estaba matando a todos" y pudo salvarse, además de encontrar ayuda en un conductor que pasaba en ese momento.
La madre, sin embargo, había recibido un disparo en la mano mientras intentaba arrebatar el arma a su marido para proteger a sus hijos.
Los agentes acudieron a la casa de los hechos, ubicada en Monroe Township, a las afueras de Columbus, a las 16:30 horas del jueves poco después de recibir dos llamadas al 911. La primera procedía de la madre que gritaba al teléfono que "le habían disparado a sus bebés" y otra del conductor que se topó con la hija de estos mientras corría desesperada por la calle, según un comunicado de prensa de la Oficina del Sheriff del Condado de Clermont.
Al llegar, los agentes encontraron a los tres menores con heridas de bala fuera del domicilio y trataron de salvarles la vida, sin éxito; la madre fue trasladada al hospital con lesiones leves. “Este era el hombre al que todos los días se despertaban buscando protección, amor y guía en todas las cosas…”, dijo Gast. “Él era su mundo, era su guardián y los ejecutó a sangre fría”.
La detención de Doerman no fue del todo complicada, pues las autoridades le encontraron sentado en las escaleras de su casa y no puso resistencia alguna al arresto. El viernes, fue procesado por tres cargos de homicidio agravado y los agentes aún no han relevado un motivo detrás del crimen, informa La Nación.
Los vecinos de Monroe aseguraron haber escuchado disparos. “Estaba sentado en el garaje y, de repente, escuché ‘boom, boom’ y como cinco más, y dije: ‘Son siete tiros’”, dijo Alexis Spoonamore a WLWT-TV en Cincinnati. “Estoy temblando. fue mucho”.