El presidente de Rusia, Vladimir Putin, reconoció este viernes que las Fuerzas Armadas de Ucrania han comenzado ya su tan anunciada contraofensiva, destinada a recuperar territorio perdido en el marco de la guerra, iniciada por Moscú en febrero de 2022. Una nueva fase marcada por la catástrofe de la presa de Nova Kajovka. Mientras las inundaciones siguen en la desembocadura del Dniéper, el Kremlin asegura que el río volverá a su cauce el próximo viernes.
El mandatario ruso también confirmó el despliegue de armas nucleares en territorio bielorruso a partir del próximo mes. "Todo va según lo previsto. Los días 7 y 8 de julio se prepararán las instalaciones. Después pondremos en marcha medidas para la obtención de diferentes tipos de armamento", aseveró Putin. Entretanto, sobre el terreno, continúan los ataques.
Al menos tres personas han muerto y otras 26 han resultado heridas como consecuencia de un ataque ruso con cohetes y aviones no tripulados ocurrido esta pasada madrugada en zonas residenciales de la región ucraniana de Odesa, en el sur del país, han denunciado fuentes oficiales ucranianas.
La Administración Militar Regional de Odesa ha denunciado ataques efectuados por por drones kamikaze Shahed-136 y Shahed-131. Si bien la defensa aérea de la zona destruyó los aparatos, sus fragmentos acabaron impactando contra un edificio residencial que se incendió.
Entre los 26 heridos hay tres niños en pronóstico reservado, según el balance provisional de la Administración, recogido por el portal ucraniano 'Real Gazeta'.
Las autoridades ucranianas aseguran que han logrado avanzar 1.400 metros hacia el este en un solo día en el frente de Bajmut, uno de los puntos claves. Un portavoz militar, el coronel Serhi Cherevati, ha destacado que las fuerzas ucranianas están atacando al enemigo, contraatacando y aprovechando las rotaciones de unidades rusas.
Además, Cherevati ha denunciado ocho bombardeos de la aviación rusa y 300 obuses lanzados en las últimas horas. El coronel también ha puntualizado que Moscú se encuentra intentando reforzar sus posiciones defensivas.
El Ministerio de Defensa británico ha confirmado que las fuerzas ucranianas han efectuados en las últimas 48 horas "importantes operaciones" militares en varias partes del este y el sur del país.
Sobre Rusia, Londres percibe un "desempeño mixto" en la respuesta a estas nuevas operaciones. Si bien algunas unidades están efectuando "maniobras de respuesta fiables" otras "se han retirado, desordenadas" y se han visto obligadas a atravesar sus propios campos de minas, lo que ha causado "bajas" entre las fuerzas rusas, siempre según el Ministerio de Defensa británico.
Por otra parte, el Departamento de Defensa de Estados Unidos ha anunciado el envío de otros 2.100 millones de dólares (1.950 millones de euros) en ayuda militar a Ucrania, desde munición para sistemas de defensa aérea Patriot a sistemas aéreos no tripulados.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha agradecido en su cuenta de Twitter al jefe de la Casa Blanca por este nuevo y "fuerte" apoyo del pueblo estadounidense a la causa de Kiev. "En medio de un terror y ecocidio sin precedentes de Rusia debido a la explosión de la central hidroeléctrica de Kajovka, esto es más importante que nunca", ha manifestado.