Las primeras palabras de Kathleen Folbigg, indultada después de 20 años de prisión por matar a sus cuatro hijos

Kathleen Folbigg ya puede disfrutar de su libertad después de haber pasado 20 años en la cárcel por unos asesinatos que ahora se han puesto en duda, el de sus cuatro hijos.

A sus 55 años, Kathleen, ha pasado un auténtico calvario desde que hace dos décadas fuese encarcelada por haber matado a sus tres hijos, Patrick, Sarah y Laura, y por el homicidio involuntario de su primer hijo, Caleb, todos ellos entre 1989 y 1999, cuando lo menores tenían entre 19 días y 19 meses.

Nuevas pruebas genéticas

Veinte años han sido necesarios para que nuevas pruebas genéticas pusieran en duda el veredicto emitido por la justicia australiana sobre la muerte de los menores y la fiscalía de Nueva Gales del Sur indultase a Kathleen de inmediato.  

Tras salir liberada y fundirse en un abrazo con su amiga Tracy Chapman, quien ha sido un gran apoyo durante todos estos años, Folbigg afirmó: “Estoy tan eufórica, estoy muy nerviosa” a declaraciones de 9News.

Ante lo abrumador de la situación y todavía sin ser muy consciente de lo que ha sucedido, respondía a los medios ante su reciente puesta en libertar: “No sé, necesito un trago de agua. No se nada más

Siempre mantuvo su inocencia

La acusada siempre ha mantenido su inocencia, asegurando que todos sus hijos murieron por causas naturales. La revisión de este caso ha tenido lugar después de que una investigación científica apuntara a una posible mutación genética que provoca arritmias letales.

Los puntos clave de este nuevo informa que ha llevado a la decisión del indulto incluyen "la posibilidad razonable" de que tres de los cuatro niños murieran por causas naturales.

"Creo que todos tenemos que ponernos en el lugar de Folbigg y dejarle ahora el espacio que necesita para continuar con su vida; no acosarla o perseguirla de ninguna manera. Ha sido un calvario de 20 años para ella. Le deseamos lo mejor para el resto de su vida", ha indicado el fiscal.