Ralph Yarl, un adolescente de Missouri, Estados Unidos, fue a buscar a sus hermanos menores cuando fue tiroteado. Cuando le abrieron la puerta un hombre blanco le dio varios tiros. El menor se recupera en su casa.
El joven se había equivocado de puerta. Había llamado a la vivienda que no era.
El fiscal del condado de Clay, Zachary Thompson, ha presentado cargos contra Andrew Lester, de 84 años, por las heridas causadas al adolescente Ralph Yarl. El hombre, que está en libertad provisional, podría enfrentarse a cadena perpetua.
El autor de los disparos se enfrenta a cargos por asalto en primer grado y acción criminal armada. Yarl recibió varios impactos de bala en la cabeza y el brazo de los que ha sobrevivido.
Su padre cuenta que ha sido dado de alta y se recupera en casa, con las atenciones de su madre que es enfermera. “Sigue mejorando. Responde y está haciendo buenos progresos”, ha explicado el hombre en palabras a la agencia EFE.
La Policía sigue investigando los hechos. El propio acusado habría llamado a la Policía, a la que explicó, según la cadena KCTV5, que disparó nada más abrir la puerta y que al ver al adolescente huir llamó a las autoridades.
El hombre admitió a los agentes que la víctima no tuvo tiempo ni de hablar pero que disparó por miedo. “Era lo último que quería hacer (disparar), pero estaba ‘muerto de miedo’ debido al tamaño del hombre y la edad de Lester (84 años) y su incapacidad para defenderse”.
Missouri es uno de los estados de Estados Unidos con una ley de “defensa del espacio propio”, que permite a aquellos que se sienten amenazados defender su vida o propiedad sin retroceder.
La familia de Yarl ha iniciado una campaña en GoFundMe que ya ha recaudado más de 1 millón de dólares. Los abogados de la familia han criticado la puesta en libertad provisional del sospechoso.