Una cámara de seguridad grabó el momento del peor accidente ferroviario en la historia de Grecia. Eran poco más de las 23:20 horas de la noche del martes: las imágenes muestran cómo el tren de pasajeros avanzaba en la oscuridad hasta que, de repente, se produjo una enorme explosión. Acababan de chocar frontalmente contra un convoy de mercancías que iba en sentido contrario por la misma vía. El número de muertos asciende a más de 40.
Duras imágenes que conmocionan aún más al país. Revienta en las calles de Atenas el malestar de los empleados ferroviarios griegos con sindicatos que justo hace tres semanas advertían del peligro de accidentes. Protestan además porque en 13 años de privatización de la compañía ferroviaria no se ha mejorado el deterioro de la maquinaria.
Las duras protestas en Grecia por el accidente. Hay gran indignación:
Que el control de los trenes sea manual porque el seguimiento electrónico no funciona es una de las causas de este accidente mortal. Las autoridades han analizado las conversaciones entre el jefe de la estación de Larisa y el maquinista, que se mostraba confiado con el recorrido minutos antes del choque frontal. El fallo humano del primero de los trabajadores citados, al girar la llave para cambiar la vía de tren, fue definitivo. El siniestro desencadenó una reacción política.
Los informes periciales han comprobado que el sistema de cambio funcionaba correctamente y el jefe de la estación de Larisa ha respondido que quizá se equivocó. En la mañana de este jueves, el rescate de víctimas se ha centrado en 10 desaparecidos. Sus familiares ya han entregado muestras de ADN para la identificación. Hay una enorme tristeza por esta tragedia.