La ministra de Defensa de Canadá, Anita Anand, ha revelado que el objeto volador no identificado derribado este fin de semana en la región del Yukón, en el norte del país, era "cilíndrico y pequeño". Mientras tanto, se sigue investigando el objeto derribado en Alaska y el globo chino detectado sobre Carolina del Norte, lo que acarreó cierta tensión entre ambas potencias mundiales. No obstante, Pekín indicó que se trataba de un globo meteorológico que se desvió fortuitamente.
Un caza F-22 estadounidense disparó contra el objeto y lo derribó tras el visto bueno del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien previamente habló por teléfono con el mandatario del gigante norteamericano, Joe Biden. Dicho objeto se encontraba a unos 161 kilómetros de la frontera con Alaska y a unos 12 kilómetros de altitud, lo que suponía un riesgo para la aviación civil.
Anand, cuestionada respecto a la posible procedencia china del objeto, ha señalado que "no sería prudente que especulase sobre el origen en estos momentos", añadiendo que hay que esperar hasta que las autoridades hayan analizado todos los datos para ofrecer más información.
Por otra parte, este pasado viernes, Biden ordenó disparar y derribar un objeto no identificado que sobrevolaba aguas congeladas en el estado de Alaska. La Casa Blanca no ha dado detalles del origen de dicho objeto, pero sí ha explicado que era diferente del globo chino que fue derribado la semana pasada tras sobrevolar varios estados del país.
Estados Unidos ha acusado al Gobierno chino de haber desarrollado, con la implicación de las Fuerzas Armadas, un "programa" de globos para labores de espionaje y que ya han sobrevolado más de 40 países en cinco continentes. Debido al hallazgo de dicho globo, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, suspendió un viaje que tenía previsto a Pekín.