Una mujer de 72 años ha sido detenida en Alemania por apagar, supuestamente, el respirador de su compañera de habitación de hospital en la que ambas estaban ingresadas. La señora, llegó ha apagar el dispositivo hasta en dos ocasiones debido a el ruido que este producía. Ahora, la anciana se podría enfrentar a un delito de homicidio involuntario si se prueban estas acusaciones según ha confirmado las autoridades alemanas.
Los hechos tuvieron lugar en el centro sanitario de la localidad alemana de Mannheim el pasado martes por la noche. La anciana de 72 años, apagó el dispositivo que le permitía a su compañera de habitación de 79 años respirar. Tras lo sucedido, rápidamente los sanitarios presentes volvieron a conectar el respirador. Pero la mujer lo volvió a desenchufar poco después alegando que le molestaba el ruido y obviando las alegaciones de los médicos de que este era vital para la paciente.
Tras la segunda interrupción del servicio de oxígeno, la paciente mayor tuvo que ser reanimada por los servicios sanitarios, quienes consiguieron salvarle la vida. Ahora, se encuentra fuera de peligro, pero tiene que estar sometida un tiempo a cuidados intensivos según han afirmado las autoridades.
A su vez, la artífice, acusada de intento de homicidio, fue detenida en el hospital por la Policía Alemana, quien llevó a la sospechosa el pasado miércoles antes el juez para aclarar todo lo ocurrido. En caso de confirmase las sospechas, la anciana de 72 años, podría ser condenada a prisión entre 5 y 15 años o cadena perpetua si el caso se considera de extrema gravedad como recoge el Código Penal Alemán.
En Australia, Kerrod Frahm, de 31 años, ha sido acusado de homicidio involuntario tras ignorar a su hijo Tristan, de 11 años, quien perdió la vida el 20 de noviembre de 2021, después de ser mordido por una serpiente. Ahora, más de un año después, y tras una larga investigación, las autoridades han determinado al progenitor como el responsable de la muerte de Tristan.
Según señala la investigación, el padre hizo caso omiso de las súplicas de su hijo, quien estaba agonizando por la picadura de la serpiente. El padre no se lo tomó en serio y no llevó al pequeño al hospital para ser atendido, poco después, el menor fue encontrado inconsciente en el jardín de la casa familiar, sin nada que hacer por su vida.