Una joven boliviana de 22 años ha ingresado en un hospital de Buenos Aires (Argentina) por una sobredosis de medicamentos. Una vez allí la Policía ha comprobado que ha estado desde los 14 secuestrada. Durante su cautiverio tuvo un hijo, de ahora 7 años. Su secuestrador ya ha sido detenido.
El 18 de junio de 2015, la entonces menor de edad fue al colegio La Merced, en La Paz (Bolivia) y nunca regresó a su casa.
La División Trata y Tráfico de Personas de la República de Bolivia logró saber que un hombre “mediante acciones de enamoramiento, convenció” a la joven de “huir hacia Argentina oculta en un vehículo” y que una vez en Buenos Aires, la encerró en un taller textil de la localidad de Villa Madero, donde durante ocho años vivió y trabajó “sin mantener comunicación con sus familiares”, según publica Diario de Cuyo.
A través de la Red LYNK del Programa de Asistencia contra el Crimen Trasnacional Organizado (El PAacCTO), el Departamento Trata de Personas de la Superintendencia de Investigaciones --que se hizo cargo del caso -- pudo conocer los detalles de la investigación de la Policía de Bolivia.
Gracias a esta información determinaron que la joven, que ingresó en el Hospital Santojanni del barrio argentino de Liniers por una “sobredosis intencional de medicamentos”, llevaba ocho años secuestrada.
Inmediatamente, activaron el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata de Personas para rescatar a la joven que vivió “en situación de explotación laboral en el transcurso de estos últimos años” y a su hijo de 7 años, que nació durante su cautiverio.
Por su parte, el Juzgado Federal número 9, a cargo de Luis Osvaldo Rodríguez, ordenó el registro de una vivienda en la localidad de Villa Madero. Allí, localizaron al secuestrador, que fue detenido, y al hijo de la joven, que fue rescatado.