Un jubilado británico que ayudó a su morir a su mujer enferma terminal, no será juzgado por asesinato

David Hunter, de 75 años, finalmente no será juzgado por asesinato tras la muerte de su mujer, enferma terminal, en Chipre. El abogado del jubilado británico ha llegado a un acuerdo con los fiscales chipriotas.

La esposa de Hunter, Janice de 74 años, murió el pasado diciembre en la casa que tenía la pareja en la ciudad chipriota de Paphos, lugar que al parecer ambos eligieron para que Janice muriera, tras años padeciendo una enfermedad terminal.

David y Janice se mudaron a Chipre cuando ambos se jubilaron, en 2002, desde Northumberland, donde vivieron felices su retiro. Pero en los últimos años el sufrimiento que padecía Justice, cáncer de sangre terminal, hizo que la mujer pidiese a su compañero de vida que le ayudara a morir, según afirma la hija de ambos, Lesley.

Luchan para que salga de la cárcel

Los abogados de Hunter, quien se encuentra encarcelado desde que se produjo la muerte, luchan para que exminero retirado obtenga la libertad y vuelva a casa con su familia, según recoge Daily Mail.

El director de la organización que lleva el caso de Hunter, tiene la esperanza que las autoridades chipriotas le liberen; “En la próxima audiencia, los fuertes atenuantes de David, como su buen carácter y su larga y amorosa relación con su esposa…dados los hechos particulares del caso y la jurisprudencia en casos similares acontecidos en el mundo, que la sentencia final sea una que el tribunal considere suspenderla”