El presidente de Polonia, Andrzej Duda, ha afirmado en la noche de este martes que las autoridades polacas no tienen pruebas concluyentes sobre quién está detrás del lanzamiento del misil que ha provocado la muerte de dos personas cerca de la frontera con Ucrania. Mientras, los líderes de la OTAN y el G7, reunidos en Bali por el G20, han emitido una declaración conjunta donde han pedido que se investigue lo sucedido.
"No tenemos pruebas concluyentes en este momento sobre quién lanzó este cohete. Las investigaciones están en marcha. Lo más probable es que fuera un cohete de fabricación rusa", ha explicado el mandatario a los medios.
Duda ha asegurado que el país ha reforzado la protección, pero ha negado la existencia de indicios de que se pudiesen producir "más eventos de este tipo". "Lo que sucedió en Przewodow ha sido un incidente único", ha sostenido.
Asimismo, ha pedido tranquilidad y ha informado de que las autoridades polacas están trabajando junto a sus aliados: "Los soldados polacos están en el lugar. El apoyo de los aliados está ahí y los compromisos se cumplen", ha sostenido el dirigente del país.
"La OTAN está en alerta. Hemos fortalecido la preparación de las fuerzas armadas polacas, incluida la defensa aérea. Nuestros aviones recibirán el apoyo de aviones aliados", ha explicado.
El presidente polaco también ha anunciado que "es muy probable" que este miércoles el embajador de Polonia ante la OTAN, Tomasz Szatkowski, solicite la activación del artículo 4 del Tratado del Atlántico Norte.
"Es muy probable que el embajador solicite el inicio del artículo 4, es decir, consultas aliadas", ha informado Duda. Desde su creación, se ha invocado este artçiculo en siete ocasiones, la última de ellas a raíz de la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero. Entonces, Bulgaria, República Checa, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía y Eslovaquia pidieron mantener consultas.
Además, Duda ha asegurado que sus aliados internacionales, con los que se ha puesto en contacto esta noche, le han dejado claro su apoyo y que los compromisos aliados están en vigor para proteger la seguridad polaca.
De hecho, los líderes de países miembros de la OTAN y el G7 han emitido una declaración conjunta al margen de la cumbre del G20 en Bali, Indonesia, donde han ratificado su apoyo y asistencia a Polonia para llevar a cabo una investigación por el impacto del misil en su territorio, ante el temor de que se trate de un ataque a un país miembro de la Alianza Atlántica.
"Hoy, los líderes de Canadá, la Comisión Europea, el Consejo Europeo, Francia, Alemania, Italia, Japón, Países Bajos, España, Reino Unido y Estados Unidos se han reunido al margen de la Cumbre del G20 en Bali (...). Ofrecemos todo nuestro apoyo y asistencia con la investigación en curso de Polonia", han aseverado los líderes mundiales en una misiva difundida por la Casa Blanca.
Horas después de que Polonia reuniera a su consejo de seguridad tras la explosión en un pueblo cerca de su frontera con Ucrania, los jefes de Estado y de Gobierno de diferentes países han acordado permanecer "en estrecho contacto" para determinar "los próximos pasos apropiados" a medida que avanza la investigación. Joe Biden ha dicho al término del encuentro que dicho que no quería decir "nada hasta que se complete la investigación. Pero es improbable, analizando la trayectoria, que se tratara de un misil lanzado desde Rusia. Veremos".
Con todo, los asistentes a la reunión de emergencia también han condenado "los bárbaros ataques" con misiles que Rusia ha perpetrado en las ciudades e infraestructura civil de Ucrania durante la jornada del martes. "Reafirmamos nuestro firme apoyo a Ucrania y al pueblo ucraniano frente a la agresión rusa en curso, así como nuestra continua disposición para responsabilizar a Rusia por sus descarados ataques contra las comunidades ucranianas, incluso mientras el G20 se reúne para tratar los impactos más amplios de la guerra", esgrime el comunicado conjunto.
En medio de la cumbre del G20 que se celebra estos días en Bali, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha convocado --a sugerencia de la Unión Europea-- una reunión de urgencia invitando a los jefes de Estado y de Gobierno de Reino Unido, Canadá, Francia, España, Alemania, Países Bajos, Italia, Japón, así como a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y al presidente del Consejo europeo, Charles Michel.
Además de Von der Leyen y Michel, a la reunión han acudido el primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak; el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; el presidente francés, Emmanuel Macron; el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez; el canciller alemán, Olaf Scholz; la primera ministra italiana, Giorgia Meloni; el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte; y el primer ministro de Japón, Fumio Kishida.
En todo caso, este hecho es un vuelco de la guerra que amenaza con desencadenar una peligrosa escalada en Europa.