El asesino y necrófilo David Fuller, de 68 años, vuelve a sentarse en el banquillo de los acusados para enfrentarse a 16 nuevos cargos por delitos sexuales.
Fuller actualmente cumple cadena perpetua por matar a dos mujeres y abusar sexualmente de 102 cadáveres femeninos, entre los que se encontraban niñas y ancianas.
El ‘asesino del dormitorio’, como era conocido, asesinó y violó posteriormente a Wendy Knell, de 25 años, y a Caroline Pierce, de 20, en momentos separados en el año 1987, en Kent, Inglaterra.
Después de los asesinatos, Fuller, quien trabajaba en un hospital como electricista, se grabó durante más de 12 años manteniendo relaciones sexuales con unos 102 cadáveres de la morgue, cuerpos de personas fallecidas entre los que se encontraban niñas de 9 años hasta ancianas de 100. El condenado fue detenido en 2020.
En informaciones recogidas por Daily Mail, Fuller acudió el pasado miércoles de nuevo como acusado por 16 nuevos delitos sexuales, 12 de los delitos por penetración sexual de los cadáveres y cuatro por posesión de pornografía extrema.
Los investigadores creen que los abusos a cadáveres pueden haber sido más ya que Fuller trabajaba como electricista en el hospital desde 1989, pero no existen evidencias como los vídeos del acusado abusando de los cuerpos.