A Vladimir Putin le quedan dos años de vida, según los servicios de inteligencia ucranianos. No se sabe si la información es más propaganda que realidad pero ha sido recogida por el diario estadounidense USA Today. El mayor general Kyrylo O. Budanov hizo estas revelaciones, algunas de ellas sobre temas extremadamente delicados, en una amplia entrevista al medio americano en la Unidad de Inteligencia de Defensa de la fortificada sede del Ministerio de Defensa de Ucrania.
El titular como tal es duro, aunque no sorprende porque los rumores sobre la salud de Putin son constantes. Ya se habló de que había informes rusos que hablaban de tres años de vida como máximo dado el estado de salud de Putin.
Un funcionario del FSB (el antiguo KGB) dijo que el presidente ruso, de 69 años, "tiene una forma grave de cáncer que progresa rápidamente". "No tiene más de dos o tres años para seguir con vida", dijo esta fuente a Mirror.
Esta vez la información va un poco más allá y apunta que Putin ha recibido órdenes médicas de no realizar esfuerzos físicos importantes. Y no lo dice cualquiera.
Budanov ha señalado que, según la información de "inteligencia" que los operativos de Ucrania han recopilado desde el interior del Kremlin, parece que el presidente ruso, Vladimir Putin, sufre varias enfermedades "graves" y "no tiene una larga vida por delante". Budanov dijo que su oficina cree que Putin morirá de estas enfermedades dentro de dos años.
Budanov confiesa que los espías de Ucrania están integrados en la administración presidencial de Rusia, en su parlamento y en varias ramas de los servicios de inteligencia de Moscú. También predijo en la entrevista que si las fuerzas armadas de Ucrania continúan recibiendo una ayuda militar sustancial de sus aliados, a mediados de agosto comenzarán a obtener "victorias" decisivas en su guerra de cuatro meses con Rusia que "serán obvias para los comunidad mundial."
Putin se habría encontrado mal después de hablar con sus mandos militares después de una sesión virtual de hora y media.
Hay que considerar también que la esperanza de vida de los hombres en Rusia es de 68 años y Putin cumplió 69 en octubre del año pasado, por lo que este año celebrará su setenta aniversario.
El Kremlin no hizo ningún comentario respecto al estado de salud del presidente. De hecho, sólo en 2012 se admitió algún problema de salud, cancelando algunos actos de su agenda. Los rumores sobre su salud y su posible derrocamiento, son constantes, pero la realidad es que Putin sigue dirigiendo con mano firme los destinos de Rusia y la Guerra contra Ucrania.
Otra teoría que sigue circulando es que Putin sea apartado del poder. Los analistas de inteligencia de la empresa Dragonfly han pronosticado que Putin podría ser apartado de la presidencia de Rusia si las sanciones económicas que está llevando a cabo Occidente sumergen al país en una crisis financiera. De hecho, Dragonfly ya acertó al predecir que Rusia iba a invadir Ucrania a finales de febrero y ahora sostiene que "es muy probable que el presidente Vladímir Putin no esté en el puesto que ocupa en los próximos dos años".
Todo ello le está reportando problemas serios a su país. El bloqueo conjunto de la Unión Europea y de Estados Unidos a la economía rusa está comprometiendo la viabilidad financiera. Ya e habla de suspensión de pagos.
El futuro de Putin se encuentra en manos de seis de sus aliados más cercanos: Sergei Naryshkin, jefe del servicio de inteligencia exterior; Sergei Shoigu, ministro de Defensa; Alexander Bortnikov, exjefe del servicio de seguridad interna del Servicio Federal de Seguridad de la Federación de Rusia (FSB); Nikolai Patrushev, jefe del Consejo de Seguridad de Rusia; Sergei Chemezov, jefe de la empresa estatal Rostec, e Igor Sechin, consejero delegado de la petrolera Rosneft.