Apenas unos días después de la masacre de la escuela de Texas, se ha producido un nuevo tiroteo masivo en Estados Unidos. Esta vez ha sido en un hospital de Tulsa, en Oklahoma. Hay al menos cinco muertos. Desde la tragedia de Uvalde ha habido en el país 21 tiroteos.
Entre los cinco fallecidos en el tiroteo del Hospital de Tulsa, en Oklahoma, está el tirador. Se habría suicidado, según las pesquisas. “Hay cuatro personas que fallecieron, tenemos el tirador que está muerto y creemos que se suicidó”, ha señalado el subjefe de la policía de Tulsa, Eric Dalgleish.
La policía investiga lo sucedido. Hasta el momento desconocen las motivaciones del tirador para hacer algo así. Armado con un rifle y una pistola ha entrado en el hospital de Sant Francis, en Tulsa, Oklahoma, causando el pánico y sesgando la vida de cuatro personas. Algunas fuentes señalan que podría tener a un médico en el punto de mira.
Esta vez parece que la respuesta policial ha sido muy rápida. Es precisamente la tardanza en el tiroteo de Uvalde, Texas, lo que se investiga ahora. Allí murieron 21 personas, 19 de ellas menores de edad.
Al hospital de Tulsa, los agentes han tardado solo tres o cuatro minutos en llegar y entrar. En cinco minutos estaban en la segunda planta, donde el autor de los disparos ha matado tiroteando a pacientes y personal del centro. Hay varios heridos, además de los fallecidos.
Estados Unidos tiene un serio problema que afrontar. Desde el tiroteo en la escuela Robb de Uvalde, en Texas, ha habido 21 tiroteo masivo más.