La vigilia del dolor en Texas acaba en indignación: "la policía podía haber hecho más"

  • Dolor en salón de eventos Uvalde County Fairplex recordando a los pequeños asesinados en Texas

  • "Tenemos los corazones rotos": nada mitiga el dolor de los vecinos de Uvalde en una vigilia en honor de los muertos

  • Son padres, madres, abuelos, hermanos o vecinos de las 21 víctimas de Salvador Ramos la matanza de Texas

Son familias destrozadas por la incomprensible matanza en un colegio de mayoría hispana a manos de Salvador Ramos, de 18 años, que hoy sigue cerrado, acordonado y donde el dolor y la incredulidad mandan. Los ciudadanos siguen homenajeando y recordando a las víctimas con flores, mensajes y fotografías. Familiares, amigos y vecinos de Uvalde han celebrado una larga vigilia por las víctimas del tiroteo. Los actos en recuerdo a los fallecidos se han llevado a cabo en el salón de eventos Uvalde County Fairplex, en San Antonio y en Austin, capital del estado de Texas. "Gracias a todos los que se solidarizaron con nuestros vecinos en Uvalde esta noche", señalaba emocionado el alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg.

Son padres, madres, abuelos, hermanos o vecinos de las 21 víctimas sin consuelo

Desgarran el alma las escenas vividas en la conmovedora vigilia por las víctimas del tiroteo. No hay consuelo en esta pesadilla. Son padres, madres, abuelos, hermanos o vecinos de las 21 víctimas. Imposible contener el llanto. Aflora la pena en este graderío lleno con un millar de vecinos de Uvalde. Devastados. Con sus corazones rotos. Algunos rezan, se abrazan pero nada mitiga el dolor e impotencia. Les mataron a sus hijos. 

Javier sabe que su hija murió de un balazo en el pecho

Javier es el padre de una de las pequeñas muertas que murió de un balazo en el pecho. Y no hay consuelo. 19 inocentes vidas que terminaron con un disparo a bocajarro, igual que sus dos profesoras que intentaron protegerles. Su hijo sobrevivió y no le salen las palabras. Y siguen llegando flores en señal de apoyo a esta comunidad tejana de mayoría hispana golpeada por la peor matanza en una década ocurrida en un colegio. 

"Podían haber hecho más": Salvador estuvo una hora parapetado en el aula

La decepción con la policía queda patente en un vídeo que los propios padres han colgado en las redes sociales, en el que se evidencia que ellos intentaron entrar ante lo que creyeron que era una actuación pasiva de los agentes. “Están ahí fuera, ¿por qué no entran? Los padres deberíamos entrar. Todos los padres debemos ir”, se escucha, en medio de comentarios cargados de insultos. “Son nuestros hijos, ellos no se pueden defender por sí mismos del pistolero”, lamentan.

“Podrían haber hecho más”, señalan algunas voces en las calles de esta localidad de 16.000 habitantes, predominantemente hispanos. El pistolero estuvo una hora parapetado en el aula donde causó la masacre.

Testigos frustrados, residentes en la zona que vieron cómo empezó todo, desde los primeros balazos fuera del recinto, urgieron a la policía a que realizara una carga en la escuela para acabar con el atrincherado Salvador Ramos, de 18 años, que entró con fusil, pistola y una mochila repleta de munición.

“Entrad, entrad”, gritó una mujer a los uniformados casi de inmediato de que empezara la agresión, relataron testigos. Pero se decidió esperar refuerzos de las fuerzas especiales. Algunos padres no lo dudaron y rompieron ventanas para buscar a sus hijos. Al final fue un patrullero fronterizo el que logró “neutralizar” a Ramos, según relata La Vanguardia.