Un taxista de A Coruña ha sido investigado por presunto delito contra la seguridad vial después de prestar sus servicios de traslados de personas por carretera en estado ebrio. De hecho, cuadruplicaba la tasa de alcoholemia.
Según ha informado la Guardia Civil en una nota este domingo, un ciudadano alertó a las autoridades de esta práctica constante del profesional. Precisamente hace un mes informamos de otro caso muy similar con un taxista de Santa Comba.
No sabemos si es el mismo conductor, pero en si fuese así, ha continuado realizando su trabajo después de aquella intercepción. Los agentes explican que el testigo les avisó de que consumía "habitualmente" alcohol.
Lo localizaron y dieron el alto a su vehículo, para practicarle las pruebas de alcoholemia. En ellas el resultado fue una tasa superior a 0,70 mg/l en aire espirado, por lo que era de más de cuatro veces lo permitido (0,15 mg/l).
Estos hechos acarrean penas de cárcel de tres a seis meses. O una multa de 12 a 24 meses y trabajo en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días. No han trascendido más detalles sobre si la empresa para la que trabaja ha tomado medidas o si es taxista independiente.
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