La Xunta asegura cumplir la normativa al sacrificar todas las reses de una granja de Manzaneda (Ourense)

Los propietarios de la granja de Manzaneda (Ourense) a la que han sacrificado todo su ganado (49 cabezas de vacas y becerros, tres ovejas y una cabra) a raíz de un brote de tuberculosis, han protestado ante la Xunta, en Santiago de Compostela, acompañados de vecinos y miembros del Sindicato Labrego Galego (SLG). “Nos sentimos abandonados porque vemos que no van a ser suficiente la ayudas que nos van a dar”, aseguran Secundino y Luis, quienes añaden que esas indemnizaciones son “de miseria”.

La Consellería de Medio Rural defiende que cumple "escrupulosamente" con la normativa "para proteger al sector" con la decisión de sacrificio de todo el ganado en dicha granja de Manzaneda (Ourense) afectada inicialmente por tres casos de tuberculosis.

Sobre esta movilización, fuentes de Medio Rural trasladaron que "el sacrificio es obligatorio según la normativa, dado que hubo cultivo microbiológico positivo con lesiones en tejidos de dos de ellas". "Este foco es semejante al anterior, lo que refleja la necesidad de vaciado", agregan.

No hacerlo pondría en riesgo a la sanidad animal y la salud pública

"La Xunta no sacrifica vacas sanas", afirma Medio Rural. "No es de recibo hacer demagogia ni lanzar declaraciones irresponsables cuando se está poniendo en riesgo la sanidad animal y la salud pública", apostilla.

Además, Medio Rural remarca que hay 23.000 explotaciones en Galicia con control sanitario, de las cuales se controlan anualmente unas 10.000. "De estas 10.000 explotaciones, en los últimos cinco años se registró una media de cuatro vaciados sanitarios, unas cifras que muestran que Galicia está actuando bien y está haciendo bien las cosas", sostiene.

Paralelamente, expone que ha habido diferentes comunicaciones por parte de técnicos y veterinarios con los propietarios de la explotación, así como con representantes del Sindicato Labrego. "Afirmar una falta de comunicación es faltar absolutamente a la verdad", asevera.

También apunta que las diferentes indemnizaciones por vaciado, lucro cesante y sacrificio, entre otras cuestiones, supera los 42.000 euros para esta granja, a lo que se añade el valor en matadero. "El ganadero recibirá íntegramente el valor de las reses, por lo que no perderá dinero. Al contrario, podrá reponer la cabaña ganadera con todas las garantías", indica Medio Rural.

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