El Juzgado de Instrucción nº1 de Vigo, en funciones de guardia, es el encargado de investigar las causas del incendio declarado en la madrugada de este miércoles en el centro de Vigo, en el que perdieron la vida cuatro personas y otras nueve tienen heridas de diversa consideración, entre ellas una niña de ocho años que permanece muy grave en la UCI.
Las autoridades consultadas indican que el incendio comenzó en el portal del inmueble, aunque los residentes del edificio, que desde hace tiempo sufren amenazas de uno de sus vecinos, aseguran que “se produjo en uno de los pisos de la cuarta planta”.
“Esto se veía venir” dice uno de los testigos, quien lamenta que las administraciones “no hubieran hecho nada”.
Según nos cuenta este vecino, no es la primera vez que sucede algo así; “es habitual presenciar peleas entre ellos, incluso con machetes”, “ya en agosto incendió el quinto”, dice refiriéndose al expresidiario al que acusa de prender el fuego, “esta vez puso un cordón en el bajo para que no pudiésemos salir".
Esta persona, a la que los vecinos señalan como culpable del incendio, lo describen como “un conocido de la policía, con adicciones y causante de muchos problemas y discusiones” por lo que hace un tiempo su propio compañero de piso “lo echó a navajazos”, afirma.
“Es la crónica de una muerte anunciada”, espeta, pues se despidió de sus vecinos según sus palabras diciendo que “si yo no vivo aquí no vive nadie”.