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Tras tres meses de prueba, en Bilbao se pone en marcha la verdadera entrada en funcionamiento de su Zona de Bajas Emisiones (ZBE), es decir, ya se empieza a multar a aquellos vehículos de gasolina matriculados antes de 2001 o los diésel matriculados antes de 2006 que circulen por el centro de la Villa.
Las señales verticales y horizontales, pintadas sobre la calzada, llevan desde principio de verano advirtiendo a todos aquellos que accedan en coche a los barrios de Abando e Indautxu de que están en la ZBE de Bilbao. Desde el 15 de junio se ha probado el funcionamiento de la nueva zona advirtiendo a los infractores pero sin castigo. Hasta ahora, porque a partir de hoy lunes, los infractores serán castigados con sanciones que ascienden a 200 euros, ya que están consideradas como infracción grave, según la Ley sobre Tráfico.
Eso sí, habrá un descuento del 50 por ciento “por pronto pago”, matiza el Consistorio bilbaíno, una rebaja a la que renunciarán quienes decidan recurrir la multa y en cuya alegación deberán presentar “la evidencia de la autorización de acceso emitida, en cada caso, por la persona o entidad que la gestionó: invitación de persona residente/comerciante, tique del parking, registro del hotel/taller/centro, registro de la oficina de atención de la ZBE, etc”, señalan fuentes municipales.
Las 27 cámaras de lectura de matrículas instaladas para controlar los accesos a esta zona llevan meses testando su funcionamiento. Pero es ahora cuando tienen que demostrar su capacidad para detectar vehículos sin etiqueta ambiental infringiendo la normativa. Los dispositivos están conectados a las bases de datos municipales y la DGT.
Habrá excepciones. Por ejemplo, se autorizará el acceso a los vehículos de residentes empadronados en la ZBE antes de la entrada en vigor de esta norma, vehículos históricos, aquellos que trasladan a personas con movilidad reducida, vehículos de emergencias, ciclomotores de menos de 50 cc y velocidad menor a 45 km/h, y las personas que acrediten que han comprado un vehículo poco contaminante hasta la entrega del mismo.
El objetivo es reducir la contaminación del aire, también la acústica, y contener la emisión de gases que provocan el cambio climático. En concreto, se pretende reducir a la mitad los 55.000 vehículos que circulan a diario por los barrios de Abando e Indautxu.
Bilbao se convierte así en la primera ciudad vasca en poner en marcha su ZBE y, por tanto, en restringir el acceso, circulación y estacionamiento de vehículos, tal y como establece la Ley de Cambio Climático y Transición Energética a todos los municipios españoles mayores de 50.000 habitantes.
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