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Un joven de 23 años ha muerto tras ser apuñalado el sábado en el barrio getxotarra de Algorta, según el Departamento vasco de Seguridad. Cinco menores de edad han sido detenidos en relación con el suceso.
El suceso tuvo lugar a las 23.20 horas del sábado en las inmediaciones de la plaza Satistegi, una zona concurrida de bares. La Ertzaintza tuvo conocimiento de que se había producido un altercado en la vía pública en Algorta, donde un joven había sido agredido con un arma blanca.
Agentes de la comisaría de Getxo y de la Policía Local, así como personal sanitario, se desplazaron al lugar y encontraron a la víctima con lesiones muy graves, por la que fue evacuado al hospital de Cruces, en Barakaldo, donde falleció.
Poco antes de la medianoche, la Ertzaintza conjuntamente con la Policía Local de Getxo, localizaban en la estación de metro de Algorta, a cinco menores presuntamente implicados en esta agresión y procedían a su arresto.
Asimismo, en una papelera de la estación localizaron dos cuchillos con restos de sangre que, presuntamente, fueron utilizados para cometer el homicidio.
Desde la comisaría de Getxo se mantiene una investigación abierta para esclarecer este homicidio.
En declaraciones a Europa Press, una tía del joven, con quien vivía en un inmueble de Algorta ha asegurado no conocer las circunstancias en que se pudieron desarrollar los hechos: "Acababa de salir de casa y a los 20 minutos nos tocaron la puerta y nos dijeron que habían apuñalado a Felipe".
De hecho, sus propios familiares pensaban que la víctima aún se encontraba en casa y cuando bajaron a la calle tras ser alertados de lo acontecido por unas amigas de la víctima, les dijeron que Felipe estaba "muy malherido", solo vieron cómo los servicios sanitarios le estaban "prestando auxilios, pero cuando llegó al hospital no se pudo hacer nada".
"Es lo único que sabemos porque no hemos podido ni verle. No dio tiempo ni a que se produjera una pelea. Bajó solo de casa y no sabemos por qué salió ya que estaba en casa jugando a la 'play'", ha insistido, al tiempo que ha indicado estar a la espera del informe del forense.
Por último, y tras reconocer que no pudo ver a los cinco detenidos, ha sostenido que es muy extraño porque "en Algorta esas cosas no son normales". "Siempre ha sido un barrio muy sano pero últimamente viene gente de otras partes a armar jaleos. Es una pena", ha finalizado.
La alcaldesa de Getxo, Amaia Agirre, por su parte, ha condenado lo ocurrido y ha subrayado que la localidad no acepta "este tipo de comportamientos". Agirre ha tomado parte en el inicio del Ibilaldia 2024, la fiesta de las ikastolas de Bizkaia que este domingo se celebra en Getxo, organizado por San Nikolas Ikastola.
Tras resaltar que en Getxo no se aceptan este tipo de comportamientos, Agirre ha condenado lo sucedido y ha remarcado que Getxo es "un municipio de paz y diverso". "Entre todos trabajamos cada día en la convivencia", ha añadido.
Asimismo, la regidora ha trasladado su solidaridad a la familia de la víctima, que ha fallecido tras ser trasladado al hospital barakaldés de Cruces.
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