La operación 'Chapela' contra los chats porno se precipitó cuando los sospechosos empezaron a difundir material pedófilo

  • Los grupos de WhatsApp seguían activos y META no terminaba de clausurarlos

  • Ante la certeza de que se compartía material pedófilo el juez autorizó la entrada en las casas de los investigados

  • Más de un millar de escolares de Gipuzkoa fueron agregados sin autorización a estos chats, creados por un menor de 14 años

La voz de alarma la dio el pasado mes de noviembre la madre de un alumno del colegio Aldapeta María Ikastetxea de San Sebastián (Gipuzkoa) cuando alertó a la dirección de que había, al menos, dos chats en el que menores compartían “pornografía, además de insultos y vejaciones homófobas y sexistas”.

Tras tres meses de investigación, la Guardia Civil y la Policía Nacional en el marco de la operación ‘Chapela’ detenían esta pasada semana a 12 personas en distintos puntos de España. Una de ellas, un donostiarra de solo 14 años como presunto cabecilla de la trama.

El magistrado de Madrid autorizó la operación por la certeza de los investigadores de que los grupos de WhatsApp seguían activos y la tardanza de la empresa estadounidense Meta en eliminar los chats que difundían ese material, tal y como se les había solicitado.

El contenido pedófilo precipita la operación

Pero el detonante para que la policía obtuviera el permiso del juez para entrar en los domicilios de los sospechosos, entre ellos cuatro menores, fue la divulgación de contenido pedófilo. Las viviendas que se registraron estaban ubicadas en San Sebastián, Madrid, Toledo y Dos Hermanas (Sevilla).

El Código Penal contempla penas de entre tres meses y un año por la tenencia y distribución de pornografía infantil. Los investigados podrían además enfrentarse a entre uno y cinco años por un delito de corrupción de menores.

Decenas de familias denunciaron estos chats en los que, fueron agregados sin autorización un millar de menores, en ellos se compartían mensajes de odio, comentarios racistas, homófobos y fascistas, además de material pornográfico. Tal y como ha podido saber El Diario Vasco, lejos de dejar de alimentar estos chats cuando se hicieron públicos, los arrestados la pasada semana siguieron compartiendo contenido e incluso, se estaban compartiendo “violaciones a bebés” o “decapitaciones”.

Los procesados obtenían las imágenes que compartían por WhatsApp de la ‘deep web’. El cabecilla de esta trama era un menor de 14 años que fue detenido en su domicilio de la capital guipuzcoana. Él era el creador de dos de los tres grupos, capaz de mantener cien conversaciones simultáneas, además había creado una aplicación para distribuir contenido a otros usuarios. En su vivienda se localizaron el ordenador principal desde el que se iniciaron y se dinamizaron estas acciones, además de teléfonos móviles para la difusión de contenido pedófilo y múltiples archivos de vídeo y foto en los que aparecen bebés y otros menores con sexo explícito con adultos y otros menores.

Este arrestado de 14 años mantenía una conversación simultánea con cien perfiles de una conocida red social y distribuía el material pedófilo mediante un programa informático creado para ello.

Desde el viernes está en libertad vigilada a la espera de juicio en el Juzgado de Menores de Donostia, con la prohibición de utilizar las redes sociales y de mensajería móvil.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.