Tensión en el Parlamento vasco por la protesta con cencerros de los trabajadores del campo alavés

  • En esta tercera jornada consecutiva de protestas los agricultores han dejado aparcados los tractores

  • Con cencerros, a las puertas del Parlamento vasco donde se aprobaba hoy la Ley de Transición Energética

  • La protesta ha coincidido con la concentración de los sindicatos de la Ertzaintza Erne, Esan y Sipe

Han sido aislados, pero durante estos tres días de protestas se han producido algunos incidentes entre la Ertzaintza y los trabajadores del campo alavés. Se produjeron ayer durante la histórica tractorada en Vitoria y el último episodio se ha vivido esta mañana a las puertas del Parlamento vasco y ha dejado golpes y forcejeos entre algunos de los manifestantes y varios agentes de la Brigada Móvil de la Policía Vasca.

Se da la circunstancia de que los sindicatos de la Ertzaintza Erne, Esan y Sipe han coincidido protestando al mismo tiempo y ante el mismo lugar que los agricultores y ganaderos.

Los trabajadores del campo alavés han dejado esta mañana aparcados sus tractores, pero no sus protestas. Si ayer se movilizaron ante la sede del Gobierno vasco, en Lakua, hoy un centenar de ellos lo han hecho ante la sede del Parlamento vasco, aprovechando que en su interior hoy se ha aprobado el proyecto de Ley de Transición Energética y Cambio Climático.

Como a criminales

La nueva norma, acordada entre los socios de gobierno, PNV y PSE-EE, con EH Bildu y que ha sumado finalmente también a Elkarrekin Podemos- IU, establece, entre otros, objetivos concretos en torno a la penetración de energías renovables para 2030 y el pago de un canon para las empresas que instalen parques renovables. Asimismo, el Gobierno Vasco deberá llevar a cabo un plan de desinversión de combustibles fósiles.

Armados con cencerros se han apostado en las inmediaciones de la Cámara vasca, dispuestos a hacerse oír. Sin embargo, durante las protestas se han producido momentos de tensión entre algunos manifestantes y la Ertzaintza, que les impedía acercarse a la valla que rodea el edificio. “Estos días nos están tratando como criminales y eso no lo vamos a permitir”, clamaban desde Araba Bizirik.

Durante este tercer día consecutivo de protestas, los agricultores de Rioja Alavesa han vuelto a subirse a sus tractores para mostrar su descontento, aunque en esta ocasión han cambiado de escenario. De la capital alavesa a Logroño, hacia la Delegación del Gobierno de la capital riojana han puesto rumbo a primera hora de la mañana para hacer llegar sus reivindicaciones.

Mientras tanto, los trabajadores del sector primario vizcaíno se preparan para replicar mañana en Bilbao las protestas que estos días han protagonizado sus compañeros en Álava. Alrededor de medio centenar de tractores accederán a la Villa, lejos de los más de 500 que tomaron ayer la capital alavesa, en cuyo territorio el peso del sector primario es mucho mayor que en Bizkaia.

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