En el banquillo de la Audiencia de Gipuzkoa se han sentado esta mañana los tres acusados por el crimen del monte Andatza. En febrero de 2022, en ese paraje de Usurbil (Gipuzkoa) aparecía el cadáver de un donostiarra de 44 años maniatado y con el cuello cortado. Un macabro crimen que pudo estar motivado por los celos. La Fiscalía pide para el principal acusado 15 años de cárcel, tres años para la que era su pareja y exnovia del fallecido como cómplice y dos años y dos meses para una tercera mujer por encubrimiento.
Los celos motivaron una brutal pelea entre los dos hombres, en la que la víctima resultó gravemente herida. Entre el acusado y su novia le colocaron bridas en manos y pies y lo subieron a una furgoneta. En una pista abandonada del monte Andatza, el acusado le bajó del vehículo y le degolló. Su cuerpo fue encontrado un mes después.
Los tres han reconocido los hechos durante la primera sesión del juicio, que se estima que finalice el 15 de noviembre. Según el relato de la Fiscalía, el 20 de enero de 2022 la víctima salió de la prisión de Zaballa, en Álava, donde cumplía condena. Allí le fueron a recoger su exnovia y la actual pareja de ésta, que a la postre sería su asesino.
Al parecer la víctima se insinuó en varias ocasiones a su ex con la intención de reiniciar la relación. "Se me insinuó nada más salir de la cárcel", ha reconocido su expareja y acusada. Tras ser preguntado durante la primera sesión del juicio si sintió celos por estas insinuaciones, el principal acusado ha sido rotundo: "Sí".
El 24 de enero, víctima y acusados se encontraban en el piso de Hernani donde vivía la pareja junto a otra mujer. Se desencadenó una fuerte discusión y el hombre quedó inconsciente.
Aún con vida fue maniatado por el principal sospechoso con la ayuda de su novia, lo metieron a una furgoneta y se dirigieron al monte Andatza, allí presuntamente "le seccionó la garganta con un cúter". La víctima murió desangrada. La tercera acusada fue conminada por los otros a limpiar la sangre del piso.
Al principal acusado y a su cómplice se les aplica la atenuante de drogadicción ya que ambos padecen un trastorno por consumo de heroína. "Llevaba más de 24 horas sin dormir. Ese día había consumido anfetaminas, cannabis, alcohol, heroína", ha declarado el hombre. Además, a ella y a la otra acusada se les reconoce que actuaron movidas por un miedo insuperable. "Tenía un carácter cambiante, a veces agresivo" o "no sabía cómo iba a actuar, me dijo que le costaba muy poco acabar con mi vida", son las palabras que la acusada de cómplice ha dedicado al principal sospechoso.
Seis hombres y tres mujeres conforman el jurado popular que desde este lunes 6 de noviembre juzgan el crimen del monte Andatza. Aunque los tres acusados han reconocido los hechos, el proceso continúa ya que la petición de prisión por parte del Ministerio Público supera los seis años.