Las universidades afrontan sus exámenes con 1.092 positivos entre alumnos, profesores y personal administrativo. Los estudiantes han extremado las medidas de prevención porque un confinamiento les privaría de presentarse y muchos centros no repiten la prueba ni ofrecen la alternativa de examinarse online.
En algunas universidades se exige una PCR que justifique el contagio para aplazar la convocatoria. Sin embargo, cada vez es más difícil conseguir una PCR en el centro de salud por lo que los jóvenes se ven obligados a pagar una en un centro privado. Aseguran que, al ser asintomáticos en la mayoría de los casos, los estudiantes se están presentando a los exámenes a pesar de estar contagiados.
Los estudiantes universitarios que -o bien por contagiarse, o por tener que aislarse al ser contacto estrecho y no estar vacunados- no puedan presentarse a los exámenes de enero podrían tener una "segunda oportunidad" para no perder esta convocatoria. Es lo que en este sentido comunicó el ministro de Universidades, Joan Subirats.
"Estamos trabajando con las universidades para que esos estudiantes no pierdan la convocatoria de examen y tengan la posibilidad de buscar una segunda oportunidad si en ese momento concreto están en una situación pandémica", avanzó el ministro en la rueda de prensa posterior a la reunión extraordinaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), la Conferencia Sectorial de Educación y la Conferencia General de Política Universitaria, en la que se definieron las condiciones del reinicio del curso en un contexto de repunte de contagios agravado por la variante ómicron.
"Vamos a trabajar con el mantenimiento de las aulas como espacios seguros y con elementos que ya han sido probados en los meses anteriores. La única sensación de inseguridad que pueda haber es que aquellos alumnos contagiados no puedan acudir a los exámenes", reconoció el ministro. Parece que queda mucho por hacer.