El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha querido tranquilizar a las personas que a partir de este lunes volverán a retomar su actividad laboral y tengan que utilizar el transporte público garantizando el suministro de mascarillas higiénicas.
En rueda de prensa, Sánchez ha destacado que su Gobierno garantizará que se utilice dicho material en determinadas circunstancias, entre las que se encuentra el transporte público, por lo que señaló que se va a suministrar a los trabajadores dichas mascarillas a través de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Este reparto, adicional al que los empresarios garanticen los EPI a sus empleados, se está coordinando desde las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno y aseguró que los trabajadores que vayan a recuperar su actividad laboral "van a contar con esa necesaria protección recomendada por parte de las autoridades sanitarias".
Serán los agentes de las FSE y voluntarios de Protección Civil los encargados de distribuir 10 millones mascarillas higiénicas reutilizables en los nodos y estaciones de metro y cercanías este lunes y martes para todos aquellos trabajadores que acudan a sus centros de trabajo en transporte público. El objetivo es evitar el riesgo de un posible rebrote de contagios por las aglomeraciones que, en muchas ocasiones, suelen producirse y que impedirían, asimismo, que se pueda guardar la distancia de seguridad aconsejada.
Cabe recordar que el uso de estas mascarillas, aunque recomendable, no es obligatorio, por lo que los ciudadanos podrán optar por viajar sin ella. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ya indicó este sábado que en el transporte es importante mantener la distancia interpersonal y, si es posible, se debe optar por el vehículo privado, y se debe procurar el lavado frecuente de manos con jabón o solución hidroalcóholica en centros de lugares públicos y privados.
La distancia interpersonal se debe tener en cuenta también en los centros de trabajo y los establecimientos públicos, donde se pueden habilitar controles de acceso a las entradas para evitar abarrotamientos en el interior. Además, las empresas tendrán que escalonar sus horarios para garantizar que se cumplen con las medidas