La mirada en España está un día más en la sede del PP. Los barones del partido y muchos de los afiliados califican la situación de insostenible y piden un giro radical. De momento, el presidente del PP, Pablo Casado, que se niega a dimitir, ha convocado la Junta Directiva Nacional que finalmente no será el próximo lunes por petición del presidente andaluz, Juanma Moreno.
A Pablo Casado no le ha quedado otra que convocar la Junta Directiva del PP, paso previo y necesario para convocar un Congreso Extraordinario. Es el precio de la crisis interna generada por el presunto espionaje a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en el punto de mira de los suyos por un contrato millonario por el que su hermano se llevó una comisión de 55.000 euros.
Ayer en el Comité de Dirección, muchas personas de su núcleo duro le pidieron su marcha. Otros, como Andrea Levy, siguen apelando a la unidad. Una unidad que ayer no le demostraron diputados, senadores y cargos provinciales a los que convocó en Génova. Muchos ni siquiera fueron a la cita alegando que no reconocen su autoridad.
La respuesta a la llamada del presidente del partido no ha sido la que esperaban en Génova. Así que a Pablo Casado no le ha quedado otra que convocar la Junta Directiva.
El presidente del PP, Pablo Casado, para quien muchos piden su dimisión y la de sus secretario general, Teodoro García Egea, había convocado la Junta Directiva –que conforman unas 300 personas- el próximo lunes. Sin embargo, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que ese 28 de febrero celebra el Día de la Comunidad, ha pedido que se retrase al martes.
La Junta Directiva es el paso previo para celebrar el Congreso Extraordinario, algo que reclaman muchos barones y líderes del partido. Desde la Junta hasta la convocatoria del Congreso Extraordinario debe pasar como mínimo un mes.
La Junta Directiva que se celebrará la semana que viene, el 1 de marzo, está formada por unas 300 personas. La componen los miembros del Comité Ejecutivo; los 30 vocales elegidos en el último congreso nacional; los diputados, senadores y europarlamentarios; los presidentes regionales, provinciales e insulares del partido; los presidentes de CCAA o en su defecto los portavoces en las Asambleas autonómicas; los presidentes de diputaciones, consejos y cabildos insulares y los alcaldes de capitales de provincia y capitales autonómicas; los presidentes regionales de NNGG, su secretario general y otros nueve miembros; los ministros del Gobierno que sean afiliados del PP; y los comisarios europeos, entre otros.
Del último Congreso Extraordinario del PP salió elegido Pablo Casado como líder nacional, un líder ahora acorralado por su propia gestión.