Segunda noche sin incidentes en Barcelona. Tan solo una carga policial a última hora contra una treintena de personas enturbió las protestas pacíficas. Los manifestantes lanzaron globos llenos de pintura contra los vehículos policiales.
Otra noche sin violencia en Cataluña. Es la segunda consecutiva sin altercados. Solo ha habido una carga policial a última hora, rozando la medianoche, en los últimos coletazos de las protestas.
Los Mossos d'Esquadra cargaban contra una treintena de manifestantes que habían lanzado objetos a los furgones policiales. Venían de la Consejería de Interior, uno de los puntos calientes de estos días y el lugar donde los CDR tenían planificada su concentración del día, que prometían iba a ser colorida.
La velada comenzaba con el lanzamiento al aire de globos pero poco después, los globos empezaban a ser rellenados con pintura y lanzados contra los furgones policiales. Decenas de esos lanzamientos, la mayoría a un furgón de los Mossos convertido en diana para la diversión de los independentistas concentrados.
Era su simbólica acción para señalar al departamento de Interior catalán y a su consejero, Miquel Buch, del que piden su dimisión por las cargas policiales de estos últimos días.