El presidente en funciones, Pedro Sánchez, ha comenzado este miércoles la ronda de contactos de cara a un nuevo intento de investidura y lo ha hecho en Santander. Allí se reúne a puerta cerrada con Miguel Ángel Revilla.
Comenzamos a vislumbrar qué piensa ofrecer el gobierno a Unidas Podemos. La vicepresidente del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, explicaba en los micrófonos de la Cadena Ser que están “dispuestos a abrir paso a estructuras” como el Defensor del pueblo y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) resaltando el “trabajo importante” y “determinante” que supone dicha organización.
El gobierno aclara que la propuesta es para formar parte de organismo e instituciones pero no controladas. Aunque desde Unidas Podemos piensan que los cargos que les ofrece el partido socialista “justamente tienen que estar profesionalizados y no politizados”, ya que se tratarían de cargos en las administraciones del CIS o en RTVE.
Presión a los de Iglesias con esta nueva oferta y con los encuentros previos con los nacionalistas. Por ejemplo, Esquerra Repúblicana señala directamente al líder de la formación morada como uno de los principales culpables de que España continúe sin Gobierno el 4 de septiembre. “Nosotros formamos parte de un partido que tiene a su presidente en la cárcel y a Pablo Iglesias le humillan porque no tiene un ministerio”, afirmaba el portavoz del partido Gabriel Rufián.
Esta mañana Sánchez está en Cantabria, quiere personalmente asegurarse el voto a favor del partido regionalista cántabro. Lo mismo hará esta tarde en Ferraz con el PNV. Son reuniones del propio presidente, pero mañana no será él, sino los equipos de negociación de PSOE y Unidas Podemos quienes se sienten a hablar.