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La ciudad de Murcia cerrará todos los espacios de estudio, culturales y deportivos a las 22:00 horas para asegurar el confinamiento nocturno dispuesto en el estado de alarma entre las 23,00 y las 7,00 horas, al tiempo que amplía al cien por cien la ocupación de terrazas y prevé eximir a los hosteleros y vendedores ambulantes de las tasas de ocupación de la vía pública correspondientes al primer semestre.
Se trata de algunas de las medidas anunciadas este lunes por el alcalde de Murcia, José Ballesta, en rueda de prensa tras sendas reuniones de la junta de gobierno y la junta de portavoces para analizar la aplicación de las órdenes del Estado y la Comunidad Autónoma ante la pandemia del coronavirus.
Entre otras actuaciones, el alcalde ha dicho que los autobuses dependientes del ayuntamiento no se verán afectados por el estado de alarma porque el toque de queda no coincide con el horario de las rutas, si bien en el caso del tranvía se eliminará la última expedición, a las 23,00 horas, de los viernes, sábados y vísperas de festivo. El resto de semana no habrá afectación.
En cuanto a la limpieza viaria, el servicio nocturno se mantendrá como está y no se verá afectado por el confinamiento, ha explicado el alcalde, si bien ha precisado que se analizará la situación cada día para determinar "posibles ajustes" en función de las necesidades.
Por otro lado, ha informado de que todos los espacios juveniles deberán cerrar antes de las 22,00 horas, así como las salas de estudio y bibliotecas municipales, en tanto que los teatros, centros culturales y auditorios adelantarán el horario de todos los espectáculos para que acaben a las 22,00 horas y de tiempo a regresar en la horquilla horaria decretada por el gobierno.
En cuanto a las actividades deportivas, el ayuntamiento cerrará todas las instalaciones antes de las 10 de la noche con el mismo propósito de conseguir el cumplimiento del toque de queda para trabajadores y usuarios, mientras que el sector hostelero verá ampliada del 75 al 100 por cien la ocupación de sus terrazas con vistas a compensar la reducción de su aforo interior.
En ese sentido, ha adelantado la voluntad de los grupos de llevar al próximo pleno la exención de tasas por ocupación de vía pública para terrazas y mercadillos ambulantes. Los hosteleros de la ciudad de Murcia no pagarán las tasas municipales por la instalación de terrazas durante el primer semestre de 2021, lo que les supondrá un ahorro de 380.000 euros.
La medida que pretende paliar los efectos que la crisis del coronavirus está teniendo en ese sector se ha acordado este lunes en la comisión de pleno de Infraestructuras, Hacienda, Gestión Económica y Asuntos Sociales, en la que se ha decidido ampliar la actual bonificación que los hosteleros ya tienen en esa tasa, del 50 por ciento.
También se reducirá a la mitad la tasa aplicable a los mercadillos semanales durante el primer cuatrimestre de 2021 y el próximo año no habrá subida de impuestos, tasas y precios públicos municipales, que ni siquiera se actualizarán con la inflación. El concejal de Hacienda, Eduardo Martínez-Oliva, ha recordado que desde 2013 no se ha subido ningún impuesto e incluso algunos, como el de bienes inmuebles, se han revisado a la baja, de forma que en 2020 se ingresaron 10 millones menos que en 2018 por ese concepto.
En total, las medidas y bonificaciones fiscales locales desde el pasado marzo han supuesto un ahorro de 2 millones a los contribuyentes. Estas medidas deberán aprobarse en el pleno municipal del próximo jueves, cuando el portavoz municipal del PSOE, José Antonio Serrano, ha adelantado que su partido las apoyará siempre que el ayuntamiento estudie ampliar la exención del pago de la tasa de terrazas hasta final de 2021.
Además, ha pedido dotar de más personal al servicio de Calidad Urbana para agilizar los expedientes de modificaciones de licencias para permitir la instalación rápida de estufas o cerramientos en terrazas. El alcalde, tras adelantar también la creación de un grupo policial dedicado a velar por el cumplimiento de este estado de alarma, ha informado de que desde la segunda ola se han puesto 13.546 denuncias por no usar mascarillas o hacer un mal uso; 691 por exceder el número de personas de grupo, 409 por locales, 380 por exceso de ocupación de vehículos y 184 por fumar sin distancia de seguridad, entre otras infracciones.