Para los que aún dudan o tienen reparos ante la vacunación, atentos al contundente mensaje de alerta que lanzan cerca de 26.000 médicos de más de 50 sociedades científicas. Una llamada de atención a los no vacunados frente al coronavirus: el 73% de los que han entrado en las UCI no lo estaban, aunque se les había ofrecido la vacuna. Los expertos insisten: el coronavirus puede dejar secuelas graves durante muchos años.
Así, el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) ha recordado, ante algunos casos detectados de personal sanitario que no se ha inoculado la vacuna de la COVID-19 de manera voluntaria en apoyo a planteamientos negacionistas, que este negacionismo puede suponer un "riesgo" para la salud pública y que la vacunación frente al virus SARS-Cov-2 es un ejercicio "imprescindible" de responsabilidad y solidaridad que está basado en la evidencia científica y que responde a los principios y normas del código de deontología médica.
"Los integrantes y partidarios de los movimientos negacionistas que estas acciones suponen un evidente riesgo para la salud individual y colectiva, y vulneran de manera clara la esencia de la propia profesión que debe de contribuir a generar confianza en las autoridades sanitarias y el conocimiento experto", ha dicho la organización.
Entre los principios y objetivos del CGCOM está velar y trabajar para el mantenimiento de una correcta actitud y una buena praxis médica de todos los profesionales y que las críticas deben estar basadas en la evidencia y el conocimiento experto para no poner en riesgo la salud de todos.
Por ello, el organismo ha insistido en que estas actuaciones, en un contexto de pandemia como el actual, pueden generar una "importante" alarma social y alentar de manera "irresponsable" a la desobediencia civil, además de ser contrarias a la evidencia científica.
Finalmente, el CGCOM ha instado "encarecidamente" a todos los profesionales sanitarios a vacunarse, puesto que son agentes de riesgo y transmisores de enfermedades y pueden incurrir en un supuesto de irresponsabilidad respecto a la Administración que puede ser reclamado por esta al profesional sanitario.