La Comunidad de Madrid evaluará a lo largo de este lunes el ritmo de limpieza de las calles de la capital y la región para decidir la vuelta de las clases el próximo miércoles, si bien no descarta que se prolongue el cierre ante "la "situación extraordinaria" que ha dejado la borrasca Filomena en la región, por lo que ha pedido "paciencia" a los padres de los alumnos madrileños.
Así lo ha señalado el consejero de Justicia, Interior y Víctimas de la Comunidad de Madrid, Enrique López, en sendas entrevistas en 'TVE' y 'Onda Madrid', recogidas por Europa Press, donde ha recalcado que hay que hacer "un esfuerzo" porque no se puede llegar a las calles concretas y hay que "ir priorizando".
Hoy mismo, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ha señalado que "es una cuestión planteable" que se prolongue el cierre de los colegios debido a que hay aún nieve acumulada en muchas calles así como en cubiertas de los centros.
"Se trata de ganar tiempo al tiempo y que la movilidad se vaya convirtiendo en la regla general. El poder utilizar grandes vías se puede conseguir creemos en 48 horas. La normalidad completa se tardará algún día más. Pedir sacrificio porque estamos viviendo algo insólito y tardará tiempo en volver a repetirse", ha reseñado López.
El consejero madrileño ha subrayado que el objetivo que se marca ahora el Gobierno regional es recuperar la movilidad en la ciudad y en las carreteras, si bien ha insistido en que los recursos son limitados como puede pasar en cualquier ciudad como pasó en Nueva York con la gran nevada que sufrió hace unas semanas.
"Hay que limpiar cuanto antes las calles y las carreteras para ganar a la movilidad que es lo que una ciudad metropolitana como es la capital necesita para volver a la normalidad", ha indicado.
López ha señalado que hoy mismo se evaluará la posible vuelta a las clases el próximo miércoles en función de lo que se consiga este lunes limpiar. "Hay que tomar decisiones responsables pero hay que ser conscientes de que estamos ante situación evolutiva. Las temperaturas serán frías pero no tanto como se creía", ha dicho.
"Tenemos que evaluar el día de hoy para ver cómo finaliza y cómo va el ritmo de trabajo. Entiendo que los padres están preocupados. Les pido un poco de paciencia. Lo fácil sería cerrarlos toda la semana pero vamos a esperar a cómo evoluciona la limpieza en función de lo que hoy se consiga. No se descarta claro. Es una situación extraordinaria", ha recalcado.
López también ha señalado que no es momento de hacer "juicios precipitados" en relación a decidir si declarar a la ciudad zona catastrófica por los daños del temporal, dado que primero habrá que evaluar las consecuencias.
Por ello, ha tachado de "precipitada" las manifestaciones del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska al respecto al no tener los datos sobre los daños, que en líneas generales ha afectado sobre todo a la caída de árboles.
"Aunque a muchos le pueda parecer algo menor, Madrid se puede quedar sin muchos árboles y son muy importantes para mantener el equilibrio ecológico. Hay situaciones que hay que valorar en su justa medida y requiere de una reflexión serena y objetiva, que es fundamental", ha reseñado.
Además, ha señalado que ha habido un trabajo coordinado entre las diferentes administraciones, poniendo como ejemplo los coches que se quedaron atrapados en las carreteras como la M-30 y la M-40 dividiendo el trabajo entre la UME, los bomberos de la comunidad y agentes forestales, entre otros cuerpos de seguridad.
Asimismo, López ha indicado que desde el Gobierno regional se ha asegurado el funcionamiento del Metro, que ha sido el único transporte pública que ha estado en marcha estos días y que ha sido fundamental para la movilidad de las personas que necesitaba trasladarse por extrema necesidad.
También el consejero madrileño ha aprovechado para pedir a las empresas privadas que den "cierta flexibilidad" a sus empleados para evitar aglomeraciones en el Metro de Madrid.
En cuanto al Covid ha recalcado que sigue presente y ha solicitado a los ciudadanos que no se quiten la mascarilla. "La probabilidad de contagiarse en el metro es baja". El aire se renueva y los contagios son menores porque la gente no interactúa. Pedir responsabilidad pero también cierta tranquilidad", ha subrayado.