La lava del volcán de Cumbre Vieja sigue cayendo al mar, cambiando el contorno de la isla de La Palma. El nuevo delta tiene ya más de 500 metros de ancho y sigue creciendo a cada minuto que pasa. La modificación será incluida en los mapas cuando termine el proceso eruptivo. Entonces, la isla bonita habrá cambiado oficialmente para siempre.
El impresionante delta sobresale de la línea de costa. Una modificación que más adelante, se incluirá en los mapas oficiales.
Ahora, los investigadores, siguen muy de cerca la evolución del magma. “La lava ha encontrado ya un camino hacia al mar, creemos que es lo que se va a mantener”, ha explicado un vulcanólogo.
El magma ya le ha ganado 9 hectáreas al Atlántico. Ahora, ese territorio pertenece automáticamente al Estado. De momento, la pirámide humeante mide medio kilómetro de ancho y 50 metros de alto.
Aunque la zona está acotada, los asentamientos son frágiles y podrían colapsar provocando derrumbes.
El contacto de la lava con el mar ha formado una enorme columna de vapor de agua y gases tóxicos. Por eso, los vecinos confinados de los cuatro barrios de Tazacorte no podrán salir de sus casas hasta que hoy se compruebe la calidad del aire.
Además, el viento hace que el humo ya no sea vertical y toma dirección suroeste, hacia el mar.