Un juez de la Audiencia Provincial de A Coruña ha condenado a 15 años de prisión a un hombre por violar y abusar sexualmente de su hijo menor de edad desde que este tenía 12 años de edad y hasta que denunció los hechos tras cumplir los 17.
Una vez haya cumplido su pena de prisión, el condenado deberá permanecer durante al menos otros 10 años bajo vigilancia y además le estará prohibido entrar en contacto con la víctima o aproximarse a él durante 24 años. Por otra parte, el hombre condenado por violación y abusos sexuales a menores con agravamiento de parentesco perderá la patria potestad de sus tres hijos con efecto inmediato.
Tal y como señala el informe de la sentencia, los abusos comenzaron cuando la víctima tenía 12 años y no se conocieron hasta 5 años más tarde cuando el menor denunció los hechos. Al parecer el padre le había hecho prometer que guardara el secreto y que no se lo contara a nadie.
Los magistrados de la Audiencia de A Coruña apuntan que el nombre habría hecho uso de su posición de poder como padre para ejercer los abusos y someter al menor. Además, relatan que de forma progresiva los abusos sexuales fueron agravándose llegando a adquirir el grado de violación según el testimonio recogido por el tribunal.
La sala asegura que el detenido actuaba con el convencimiento de que sus crímenes permanecerían ocultos ya que su hijo "no contaría nada". Si bien es cierto que fue así durante años y el padre consiguió que el menor no contara lo sucedido, finalmente decidió denunciar los hechos que acabaron con su agresor en prisión.
A pesar de que a partir de los 14 años el menor comenzó a ser consciente de lo sucedido, el miedo infundido por su padre le impidieron tomar ningún tipo de acción que revelara los abusos. Para llevar a cabo los abusos el padre mostraba una actitud violenta y amenazante que también sufrió la madre de la víctima.
Preocupa el aumento de abusos a menores durante el confinamiento
El confinamiento a causa de la pandemia por coronavirus ha hecho que todas las miradas se centren en el núcleo del hogar. La necesidad de que la población tenga que permanecer en casa está ocasionando que aumenten los casos de abusos sexuales intrafamiliares que, según destacan los expertos son más difíciles de detectar.
No obstante, muchos de estos casos no han surgido con la pandemia si no que son situaciones que se vienen arrastrando durante años pero que afloran ahora fruto de una mayor convivencia en el hogar de todos los miembros de la familia durante más tiempo. Frente a cualquier tipo de abuso las autoridades llaman a denunciar los hechos y aseguran la máxima protección a las víctimas.