El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, no ha podido evitar llorar tras recibir dos minutos de aplausos hoy en l Asamblea General ordinaria de la patronal tras la polémica generada por sus palabras sobre los indultos a los presos del 'procés'. Con los asistentes en pie, Garamendi se ha emocionado por el recibimiento de sus compañeros, llegando a derramar alguna lágrima, y ha señalado que lo que ha vivido en los últimos días ha sido una "injusticia". "He pasado unos días muy malos", ha reconocido a posteriori el dirigente de la patronal, que ha añadido que siempre ha defendido el Estado de Derecho, el imperio de la Ley, la unidad de España y la monarquía parlamentaria. "Se ha cogido el rábano por las hojas y se ha utilizado una parte de una hora de entrevista, que además no es literal", ha afirmado el líder de la CEOE.
Se refería así a las declaraciones que realizó sobre que si los indultos a los independentistas catalanes condenados servían para normalizar la situación, "bienvenidos" fueran, palabras que le granjearon críticas desde diversos sectores y alabanzas desde el Gobierno de Pedro Sánchez.
El presidente de la CEOE matizó después que su organización no se posicionaba ni a favor ni en contra de los indultos a los presos independentistas y que en la patronal se defiende la Constitución y el Estado de Derecho. Garamendi, muy agradecido con el gesto de los asistentes a la Asamblea, ha señalado que "da igual" lo que ha estado diciendo durante días y ha añadido que parece que "no vale de absolutamente nada toda una vida".
"Lo que pase en España depende de la soberanía del pueblo español y de los españoles y eso es lo que hemos dicho siempre y lo que seguimos diciendo a pesar de lo que algunos se empeñen en decir o se interprete fuera de contexto", ha afirmado en su discurso ante la Asamblea, que se ha celebrado presencialmente sólo en parte, ya que muchos de sus miembros han asistido de manera 'virtual'.
Garamendi ha subrayado que los empresarios quieren a su país y que, si la CEOE se equivoca, "lo hace de buena fe". "Si los empresarios dicen que es mejor no subir los impuestos, será por algo. Lo razonamos, pero que no piensen que somos unos egoístas, porque se ha demostrado la solidaridad de todas las empresas de este país durante la pandemia", ha subrayado. Asimismo, el líder de la CEOE ha reivindicado la independencia de la organización y el trabajo que desarrolla "siempre con sentido de Estado y lealtad institucional". "Ésta es la CEOE de ayer, de hoy y la del mañana. Es la CEOE que hoy ha demostrado que sigue unida porque es la unidad la que da la fuerza para sacar adelante el país", ha enfatizado. La Asamblea General de la CEOE ha finalizado como empezó: con los asistentes a la Asamblea en pie aplaudiendo y ovacionando a su dirigente.