La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha explicado este miércoles que el Ejecutivo catalán debe estudiar detenidamente la invitación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de declarar un estado de alarma individualizado ante el impacto del COVID-19 una vez conozcan "todos los detalles".
Lo ha comentado en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press tras el ofrecimiento de Sánchez del martes a las comunidades autónomas que lo necesiten para decretar y defender la aplicación de dicho estado de alarma, así como sus posibles prórrogas, en el Congreso.
La consellera ha comentado que si la Asamblea Nacional Catalana (ANC) convoca movilizaciones por la Diada no se verán las mismas imágenes que en la manifestación en contra de la mascarilla que hubo en la Plaza de Colón de Madrid, que ha tachado de "irresponsable".
Budó ha subrayado que el derecho de manifestación está eximido de la prohibición de reuniones de más de diez personas en espacio público y privado si se respetan las medidas de seguridad.
Asimismo, ha advertido de que en septiembre "habrá un reinicio de la actividad laboral y escolar, se restablecerán las cadenas de contacto y se incrementará el riesgo de contagio", por lo que ha pedido fijar la mínima actividad social.
"La escolarización es obligatoria. Entiendo que haya familias que estén preocupadas, estamos trabajando en todas aquellas medidas que garanticen que los centros de educación sean centros seguros", ha comentado Budó.
Ante el anuncio de Sánchez de 2.000 efectivos del Ejército para realizar labores de rastreo, Budó ha reivindicado la capacidad de rastreo de Catalunya que "se ha incrementado mucho" y ha añadido que es importante para combatir la pandemia.