La Audiencia de Huelva ha condenado, tras el veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular, a la pena de prisión permanente revisable a Bernardo Montoya, el hombre acusado de agredir sexualmente y asesinar en El Campillo (Huelva) en diciembre de 2018 a la profesora zamorana de 26 años Laura Luelmo.
Además, le impone 17 años y medio de cárcel por un delito de detención ilegal en concurso ideal con el delito de agresión sexual con la agravante de género, así como en concepto de responsabilidad civil, el acusado tendrá que indemnizar con un total de 400.000 euros a los padres y hermanos de la víctima.
La Audiencia recuerda que, en su veredicto, el jurado declaró probado que los hechos se produjeron sobre las 17,30 horas del día 12 de diciembre de 2018, cuando la joven regresaba de hacer la compra en un supermercado y fue abordada por el condenado, que vivía frente a ella en una vivienda de la localidad de El Campillo.
El jurado popular le declaró por unanimidad culpable de todos los cargos de los que se le acusaba --asesinato, agresión sexual y detención ilegal-- a Bernardo Montoya, el hombre acusado de agredir sexualmente y asesinar en el mes de diciembre de 2018 a Laura Luelmo, la profesora zamorana de 26 años, en la localidad de El Campillo (Huelva). Nada más conocerse la decisión, Francisco Luelmo, tío de Laura Luelmo y abogado de la acusación particular, ha leído un comunicado en nombre de la familia Luelmo Hernández.
La desaparición de Laura Luelmo se produjo el 12 de diciembre, apenas cuatro días después de que se trasladara a vivir a El Campillo para cubrir una baja de la especialidad de Plástica en el instituto de Educación Secundaria Vázquez Díaz de un pueblo cercano, Nerva. Cinco días más tarde, tras largas batidas por la zona en la que participaron centenares de voluntarios, su cuerpo fue hallado en un lugar conocido como Las Mimbreras.
Al día siguiente fue detenido Bernardo Montoya, un vecino del pueblo que residía en una vivienda frente a la de la joven y que tenía con antecedentes por asesinato. La Fiscalía solicita 32 años de cárcel y prisión permanente revisable por los delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato.
El Ministerio Fiscal argumenta que Bernardo Montoya, --con un amplio historial delictivo al contar antecedentes penales al haber sido condenado por un delito de allanamiento de morada, un delito de obstrucción a la justicia y un delito de asesinato, entre otros--, entre las 17,25 horas y las 17,30 horas del día 12 de diciembre de 2018 "abordó a la joven, quien regresaba a su domicilio tras hacer la compra en un supermercado cercano".
Bernardo Montoya, que era vecino de enfrente de la joven zamorana, "sorprendió a la víctima" la introdujo a la fuerza en su domicilio, donde la golpeó y después de dejarla "malherida y muy debilitada", la agredió sexualmente, siempre "imposibilitándole cualquier tipo de defensa". Bernardo Montoya le provocó sufrimiento hasta causarle la muerte. Después, "para evitar que se conociera tanto la comisión del delito que acababa de cometer como que él era el autor, con ánimo de acabar con la vida de Laura, pero no sin antes someterla a padecimientos innecesarios y un sufrimiento más intenso que el necesario para causarle la muerte, le propinó más golpes", y finalmente, le asestó "un fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente", culminando los hechos con el fallecimiento de la chica.
Posteriormente, sobre las 18,42 horas, la introdujo en el maletero de su vehículo para, entre las 19,16 horas y las 19,25 horas, llegar y arrojar el cuerpo en una zona de difícil acceso y entre matorrales conocida como Las Mimbreras, situada en la carretera nacional N-435 en el punto kilométrico 166. El cuerpo sin vida de la joven profesora fue hallado el día 17 de diciembre de 2018, siendo detenido Montoya un día después y pasando a disposición judicial el día 21 de diciembre de 2018, acordándose la prisión provisional comunicada y sin fianza para el mismo.